Un manifestante del Movimiento Rebelión Popular que fue detenido tras una marcha al Obelisco se descompensó y murió, informaron fuentes del Gobierno porteño.
El hombre de 47 años protestaba junto a otras personas contra la realización de las Elecciones 2023. Según la Policía de la Ciudad, los manifestantes intentaron quemar una urna y los oficiales buscaron evitarlo.
Facundo Molares Schoenfeld fue trasladado por una ambulancia del SAME al Hospital Ramos Mejía y murió de un paro cardíaco, según informaron fuentes oficiales.
Después de conocerse la noticia de la muerte, agrupaciones de izquierda llamaron a manifestarse en el Obelisco. Por su parte, las organizaciones que forman parte del movimiento “Votamos luchar”, marcharán al Hospital Ramos Mejía en reclamo de Justicia.
En el operativo policial, fueron detenidas otras seis personas. El Encuentro Memoria, Verdad y Justicia exigió “la inmediata liberación de las seis personas detenidas: Jimena Cejas, Lucía Machado, Alicia Machado, Horacio Ferreyra, Rubén Yotec y Hernán Loyola”.
El parte oficial del Gobierno de la Ciudad sobre el hombre que murió mientras protestaba en el Obelisco
El SAME reportó que el hombre de entre 40 y 45 años sin documentación fue trasladado al Hospital Ramos Mejía desde el Obelisco. Durante más de media hora se le hicieron maniobras de reanimación hasta que se constató el fallecimiento.
Las causas del deceso se relacionan con un paro cardíaco producto de factores de riesgo.
El cuerpo fue trasladado a la morgue judicial.
Un amigo del hombre que murió: “Hablamos hoy a la mañana y nos íbamos a encontrar”
Fernando Murias, médico y amigo de Fernando Molares, habló desde el hospital Ramos Mejía. “Hablamos hoy a la mañana y nos íbamos a encontrar”, contó.
Visiblemente angustiado, el amigo de Molares explicó que el expreso político tenía enfermedades preexistentes como consecuencia de haber estado detenido.
Quién era Facundo Molares, el hombre que murió tras una protesta en el Obelisco
Facundo Molares estuvo preso en Ezeiza durante casi 8 meses y fue liberado el 29 de junio. La detención fue a partir de un pedido de extradición de Colombia, por su participación en un secuestro realizado por las FARC.
El juez de Esquel, Guido Otranto, fue quien llevó adelante las audiencias y en mayo de este año la confirmó la extradición. Su defensa tenía todavía el recurso de la Corte Suprema.
En el medio, llegó desde Colombia un inicio de trámite de proceso de amnistía de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), organismo a cargo de los temas vinculados a la guerrilla y la violencia armada. Ese mismo organismo es el que inició el proceso de extradición.
El pedido de extradición seguía vigente, pero como corresponde a la JEP colombiana y no a la justicia ordinaria, fue excarcelado en la Argentina mientras continuaba el proceso.