Las cifras alertaron a las autoridades. Entre el 4 y el 12 de este mes, en el marco del Operativo Lapacho, las autoridades concretaron el secuestro de nueve vehículos que habían sido sustraídos de diferentes provincias y se dirigían hacia el norte del país. Estos procedimientos son claros indicios de que el tráfico de autos y camionetas robados no se detiene.
Esta modalidad delictiva no es nueva, pero se repite cada tanto en nuestra provincia. No sólo los secuestros de los bienes robados en otras provincias, sino también la sustracción de autos y camionetas de alta gama. Todas las investigaciones, tarde o temprano, tomaron siempre los mismos caminos. Estos ilícitos los cometerían ladrones de diferentes provincias y los botines terminarían en Bolivia, donde serían canjeados por droga.
Los investigadores encontraron estos denominadores comunes en los casos en los que intervinieron:
– Los robos fueron perpetrados en Buenos Aires, Mendoza, Córdoba, Tucumán y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Los hechos fueron denunciados entre el 2 y el 7 de este mes, es decir, que los delincuentes no esperaron una semana para desprenderse un VW Nivus, un Ford Fiesta, tres camionetas Toyota SW4, tres Toyota Hilux y un camión.
– Según las primeras averiguaciones, las víctimas dijeron que ellos dejaron estacionados sus vehículos en la vía pública perfectamente cerrados. Los pesquisas creen que utilizaron el sistema pandora para poder apoderarse de los bienes. Se trata de un dispositivo que permite copiar el código del encendido electrónico de los vehículos. Ese sistema se utilizó para sustraer en nuestra provincia tres camionetas Hilux en menos de 72 horas. Sólo una de ellas pudo ser recuperada, ya que su conductor la dejó abandonada después de haber protagonizado un accidente cuando huía a Córdoba.
– Las camionetas secuestradas tenían colocados dominios de otros del mismo modelo y color. Los policías se dieron cuenta porque tenían grabado en los cristales los datos de la patente original.
– La ruta 34 pareciera el camino elegido por esta organización para trasladar los botines. Siete de los vehículos secuestrados fueron ubicados en ese puesto limítrofe con Salta y Santiago del Estero.
– La manera de llevarlos también tiene sus secretos. Según se sospechan, viajarían de a dos para que el primero advirtiera la existencia de algún control. Si encuentran uno, normalmente lo eluden ingresando a caminos vecinales. Pero en esta oportunidad, descubrieron que eran transportados en camiones de auxilio.
La investigación
La fiscala Susana Cordisco intervino en el caso del hallazgo de dos camionetas SW4. Acusó a dos conductores de encubrimiento agravado por el ánimo de lucro. Al no poder probar que ellos fueron los que sustrajeron los vehículos en Buenos Aires, no le quedó otra que procesarlos por circular con los bienes. Los acusados son bonaerenses y un juez les dictó la prisión preventiva por 45 días.
RETENIDAS. En 7 de Abril se hizo la mayor cantidad de secuestros.
Según confiaron fuentes judiciales, el Ministerio Público ya logró comunicarse con el propietario de uno de los vehículos. Esperan su arribo a la provincia para que brinde información sobre el robo. Ese testimonio y el análisis a los celulares secuestrados de los detenidos, serán clave en la investigación.
Las pesquisas que desarrollaron los fiscales Pedro Gallo y Diego López Ávila terminaron en Bolivia. Descubrieron que en ese país hay normas que permiten inscribir bienes sin justificar su origen. En otras palabras, pagando una multa irrisoria, legalizan el vehículo.
“Todos los datos que logramos recolectar nos permiten sospechar que el destino de estos vehículos era el norte del país. La llevan allí y, supuestamente la canjean por droga”, indicó el comisario Favio Ferreyra que está al frente del Operativo Lapacho. “Otro dato que nos llama la atención es que los conductores son de diferentes provincias. Detectamos a un salteño, catamarqueños y bonaerenses. No había ningún tucumano realizando esta tarea”, agregó.
El funcionario dijo que la investigación recién está comenzando. “Todavía no sabemos si todos los casos están relacionados, lo que nos impide asegurar que hay una o varias bandas actuando en diferentes puntos del país. Sí tienen el mismo modus operandi para robar y utilizan el mismo sistema para encubrir que están llevando un bien robado”, finalizó.
Tendencia: ahora también se comercian motos robadas en la zona de frontera
En abril, Tucumán fue noticia nacional por haber descubierto una nueva modalidad delictiva. En el marco del Operativo Lapacho, los policías descubrieron varias encomiendas que llevaban motopartes de rodados de alta gama que habían sido robados en la provincia de Buenos Aires y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Esa mercadería ilegal era enviada a Salta y Jujuy para, según la teoría de los investigadores, fuera canjeada por droga en la zona de la frontera con Bolivia. Al haber quedado al descubierto, se notó una baja en esta maniobra. Pero ahora se abrió otra.
Días atrás, en un control de rutina a un tour de compras, los policías descubrieron que en la bodega del micro había una Honda XR. Al pedir los antecedentes, recibieron la información de que el rodado había sido robado en Mendoza. “En los últimos tiempos hemos descubierto a varias personas circulando en motocicletas que fueron sustraídas en diferentes provincias. También encontramos varias que fueron robadas en Tucumán, pero los conductores eran santiagueños y salteños”, explicó el comisario Favio Ferreyra que está al frente del Operativo Lapacho.