Con pancartas en mano y la voz cargada de años de esfuerzo, cientos de jubilados tucumanos se congregaron este miércoles en la plaza Independencia, frente a la Casa de Gobierno, para visibilizar un reclamo que viene creciendo semana tras semana: “No se puede vivir con $300.000”, dicen.
La manifestación, impulsada por organizaciones como la CGT Tucumán, la UTEP, UPCN, SMATA y diversas agrupaciones civiles, se enmarcó en una jornada nacional de lucha en defensa de los derechos de los jubilados, en paralelo a la tradicional marcha de los miércoles frente al Congreso en Buenos Aires.
Entre los manifestantes, sobresalió el testimonio de María Inés, jubilada de la sanidad con 47 años de servicio. “Me jubilaron con 41 años, no me reconocieron los aportes. Y cobro menos de $400.000. ¿Cómo se supone que vivamos con eso?”, se preguntó. “Nos privamos de todo. Hay compañeros que ni siquiera llegan a $200.000. Es indigno.”
El reclamo no es solo por el monto de las jubilaciones, sino también por el acceso a medicamentos, la falta de reconocimiento a los años de aportes reales y la precarización de la calidad de vida. “Mi señora es epiléptica. Solo en medicamentos gastamos un millón de pesos. Antes teníamos cobertura, ahora nada”, relató Rómulo, otro manifestante, mientras mostraba una larga lista de fármacos que ya no puede costear.
Uno de los carteles más llamativos decía: “Milei sos una rata inmunda”, reflejo del descontento con la gestión actual del presidente. Para muchos de los presentes, las políticas del Gobierno Nacional profundizaron la crisis que atraviesa el sector pasivo.
“Milei odia a los jubilados”, sostuvo con firmeza José Ignacio, jubilado de la industria panadera. “He trabajado más de 40 años, aportado como corresponde y hoy cobro $350.000. Tengo que elegir entre pagar la luz o comer. Esto no es vida”.
Las marchas, cada vez más frecuentes y masivas, no solo denuncian el deterioro del poder adquisitivo sino que también apuntan a una deuda histórica de todos los gobiernos con los jubilados. Sin embargo, los manifestantes son claros: el ajuste actual golpea con mayor fuerza. “Nos sacaron los remedios, la moratoria. Nos están dejando en la miseria”, denunció otro de los manifestantes, según publica La Gaceta.
Durante la jornada también se anunció una nueva manifestación convocada por ADIUNT, el gremio de docentes e investigadores de la Universidad Nacional de Tucumán, para este mismo miércoles por la tarde, en lo que promete ser una seguidilla de protestas en el marco del paro nacional de este jueves.
“No pedimos lujos. Pedimos justicia. Después de una vida de trabajo, merecemos vivir con dignidad”, cerró María Inés, con la voz quebrada.
