Como no podía ser de otra manera, este primer día de mes viene cargado con un nuevo golpe al bolsillo. La dinámica inflacionaria decididamente ya ubicó la tasa mensual por encima del 3% y para junio los analistas no esperan una disminución significativa, inercia dentro de la que se destacarán incrementos puntuales de algunos servicios y tarifas para hacer del sexto mes del año un verdadero dolor de cabeza.
El dato de la inflación de mayo se ubicará entre 3,5% y 4% y en junio podría desacelerarse por un mayor efecto del cierre de actividades y del ancla que significa el menor ritmo de depreciación del tipo de cambio oficial por parte del Banco Central. No obstante, operarán una serie de aumentos, el primero de ellos tiene relación con la cuota del Monotributo, lo que afectará a los trabajadores autónomos.
Cabe mencionar que, a pesar de que la ley se aprobó a comienzos de abril y se promulgó el 21 de ese mes, la reglamentación salió recién en la última semana y no llegó a modificar el pago de mayo. Se trata de un ajuste de 35,3% tanto para las cuotas como para las escalas, que ya estarán vigentes para el pago de junio. Además, en los próximos días la AFIP recategorizará de oficio a los que les corresponde una categoría distinta con la actualización, cerca del 35% del total.
Por otra parte, se viene un aumento también en las tarifas de gas. En ese marco, aumentarán entre 6% y 7% en todo el país. Será el único ajuste del año y se concretará en junio, luego del acuerdo con las distribuidoras de gas, con lo que las primeras boletas actualizadas llegarán a los hogares en pleno invierno. Pero eso no es todo, ya que también habrá incrementos en materia de telefonía.
En ese sentido, las principales empresas de telefonía celular completarán su segundo tramo del aumento iniciado en mayo. Será de entre 7% y 10%, según la empresa, luego de que la Justicia dictara una cautelar contra el DNU que las declaró “servicio público”. El Enacom avisó que acudiría a la Corte Suprema para frenar las subas. Por otro lado, un pequeño alivio traerá aparejado junio debido a que este mes las naftas no subirán.
Y es que será la primera vez desde que se descongeló su precio en agosto de 2020 que no aumentará el precio de las naftas. Desde entonces, tuvo 13 aumentos, algunos por atraso respecto a los precios internacionales debido a la inflación y otros por subas de impuestos internos que achicaban los márgenes de las empresas. La idea del Gobierno, de la mano de YPF, es que no incrementen en lo que resta del año o al menos hasta las elecciones legislativas.
Sin embargo, cabe aclarar que, por efecto conjunto de la depreciación de la moneda y el aumento del precio internacional del petróleo, va a ser difícil que YPF pueda aguantar este incremento, que además tiende a repercutir en forma de cascada sobre los precios. En definitiva, el último mes de la primera mitad del año llegará cargado de aumentos de parte de un Gobierno nacional que lo único que redistribuye son subas de precios.
