Por estrictas directivas del gobernador Osvaldo Jaldo y mediante un decreto ayer fueron expulsados de la fuerza policial cinco agentes por “inconducta y ser investigados por otros delitos”. “No vamos a tolerar situaciones como esta en la fuerza. Ya están afuera, cuando vuelva de Salta firmaré los decretos para que sean expulsados”, había dicho el Primer Mandatario.
El secretario de seguridad, Héctor Vizcarra, confirmó ayer martes por la mañana que los “cinco agentes de la Planta Transitoria Policial (PTP) quedaron desafectados de la Policía de Tucumán, como ordenó el Gobernador”. Vizcarra esgrimió que atento al Régimen Disciplinario Policial vigente, los cinco agentes “no guardaron el decoro en virtud de la jerarquía que ostentan y por ser parte de la Departamento General de la Policía”.
En ese sentido, el funcionario del ministerio de Seguridad exhortó a todos los integrantes de la fuerza de seguridad provincial a “guardar decoro conforme a los lineamientos de las normativas de disciplina policial y actuar en consecuencia, teniendo en cuenta al trabajo que desempeñan”, finalizó.
Por un lado, el domingo a la madrugada tres policías de civil hirieron a un empleado municipal al tratar de eludir un control de alcoholemia en la esquina de Suipacha y Sarmiento. El cuarto policía que fue dado de baja quedó involucrado en una causa de narcomenudeo y el quinto efectivo fue expulsado por ser uno de los acusados de participar en el intento de huelga policial desarticulada hace poco más de un mes.