El intendente capitalino, Germán Alfaro tenía planeado utilizar la gestión al frente de San Miguel de Tucumán, como plataforma para competir por la gobernación provincial en el año 2023. Sin embargo, como en una obra de títeres, comenzó a quedar al descubierto los hilos de una administración que hace agua por todos lados, justamente, igual que la ciudad cuando llueve y se inunda de punta a punta.
No obstante, esta vez la deficiencia de su trabajo al frente del Municipio más grande de todos, quedó evidenciado en lo que respecta a un servicio esencial como lo encarna el transporte público de pasajeros. En ese sentido, cabe recordar que la Municipalidad de San Miguel de Tucumán y la de Tafí Viejo habían informado que durante el paro de la UTA de la semana pasada pondrían en funcionamiento el sistema alternativo de transporte, con traffics.
Cabe recordar que estos vehículos se habían inscripto en un registro para responder ante la coyuntura. Aunque el paro comenzó el jueves al mediodía, el municipio de la Capital comunicó la puesta en marcha del esquema “B” el viernes por la mañana, es decir, bastante tarde, debido a que por esas horas, el gremio que reúne a los choferes de colectivos había decidido levantar la medida de fuerza.
Si bien algunos funcionarios capitalinos habían dicho que los horarios y recorridos se habían informado formalmente, la oficina de prensa de la Capital no tenía datos para brindar. Pero el colmo llegó con un verdadero papelón que no tuvo demasiado eco en los medios de comunicación de la provincia. Y es que, al final, el mentado servicio alternativo de transporte ideado por Germán Alfaro no se pudo llevar a cabo.
Esto se debe al hecho de que, como el paro ocurrió en la antesala de carnaval, muchas traffics de las 300 inscriptas ya tenían compromisos asumidos para realizar viajes a Jujuy, Salta o Tafí del Valle. En ese marco, apenas un total de 50 vehículos de este tipo respondieron al llamado. Por lo tanto, el viernes, pocas unidades transitaron, pero el servicio fue brindado de manera muy irregular.
De esta forma, se consumó lo que fue el fracaso del primer día del sistema alternativo de transporte público de la capital. Los que sí cumplieron fueron los coches de Tafí Viejo: y es que, a pesar de la polémica al respecto que surgió en el municipio que integra el Gran San Miguel de Tucumán, los colectivos de EcoBus y una flota de combis cubrieron tres recorridos para unir la “Ciudad del Limón” con la Capital.
Es por ello que cabe preguntarse, ¿Hasta cuándo seguirá el intendente Alfaro sin tomar cartas en el asunto para quitarles las licitaciones a los empresarios y convocar a otra gente más capaz? Los habitantes de la ciudad sienten que se trata de otro año que se está por reventar todo y nunca la culpa es de Alfaro. Lo grave es que el intendente sigue sin hacerse cargo a pesar del hecho de que 400 coches son de líneas urbanas. ¿Cuánto tiempo más aguantarán los vecinos?
