La instrucción de la megacausa por narcotráfico interprovincial contra el clan tucumano de los Paradi y su nexo catamarqueño, realizada por el fiscal Federal Rafael Vehils Ruiz llegó a su fin, fue remitida al Tribunal Federal y se espera que se dé a conocer la fecha en que dará inicio el debate.
En el marco de la investigación, que comenzó en febrero de 2018, fueron detenidos los tucumanos Juan Alberto Paradi , Juan Alberto Paradi (h), Maximiliano Isaac Paradi, David Alberto Amado Paradi y Claudio Sandoval, quienes fueron imputados por los delitos de “tenencia de estupefacientes con fines de comercialización agravada por el número de personas intervinientes organizadas para cometerla, en grado de coautores”.
El catamarqueño detenido es Ricardo Exequiel Fernández, quien está imputado por el delito de “tenencia de estupefacientes con fines de comercialización”.
Los seis fueron apresados en distintos procedimientos y terminaron alojados en el Penal de Miraflores.
Según fuentes oficiales, la causa inició cuando personal de la División Drogas Peligrosas de la Policía de Catamarca conoció que el nexo local recibiría un cargamento de sustancia estupefaciente.
Bajo las directivas del juez Federal Miguel Ángel Contreras, se realizaron una serie de escuchas telefónicas que guiaron a los pesquisas catamarqueños a la región sur de Tucumán, que sería el área de influencia de los Paradi, incluyendo también a Santiago del Estero.
El eje de la investigación se desplazó a Tucumán, más precisamente a los departamentos Chicligasta, Simoca y zonas aledañas.
Nuevamente y a través de escuchas telefónicas y un minucioso trabajo investigativo, personal de Drogas Peligrosas y de Gendarmería Nacional establecieron que el clan tucumano comercializaba y acopiaba estupefacientes.
Con la premisa de que el contacto en Catamarca necesitaba ser provisto de más sustancia para su comercialización, en mayo de 2018 se realizaron varios allanamientos simultáneos.
En Catamarca se registró la vivienda de Rodríguez, ubicada en inmediaciones al Estadio Bicentenario pero no se logró su detención, que se concretó en otro operativo realizado en el mismo lugar, en junio, cuando fueron secuestrados cerca de 700 gramos de marihuana, 24 gramos de cocaína elementos de corte y celulares.
Durante los demás procedimientos efectuados simultáneamente en mayo, en fincas y viviendas ubicadas en la ciudad de Concepción y otras localidades aledañas se secuestró cerca de seis kilos de marihuana, más de 330 mil pesos, 750 dólares, más de 70 troqueles de ácido lisérgico (LSD), celulares y elementos de corte: También se secuestró un GPS que habría sido utilizado para ubicar las coordenadas donde desde un avión se habrían arrojado bultos con sustancia estupefaciente.
Además, en una finca ubicada en Monteagudo se logró incautar más de 270 kilos de marihuana que estaba enterrada.
Durante los procedimientos en Tucumán fueron detenidos Juan Paradi (p), Juan Paradi (h), y Sandoval. Maximiliano Paradi fue detenido a principios de agosto de 2018 en Tucumán, y con un fuerte dispositivo de seguridad fue trasladado y alojado junto a sus hermanos en Miraflores.
Finalmente, David Paradi fue detenido a mediados de agosto de ese año en Tucumán y trasladado al Penal de Miraflores. Presuntamente la banda operaba además en la provincia de Santiago del Estero, con la provisión de importantes cantidades de sustancias estupefacientes.
El clan habría efectuado ventas de drogas en la región sur de Tucumán sobre todo en la modalidad de delivery, y la provisión de sustancias también en Catamarca.
La investigación que terminó con el desmantelamiento de la peligrosa banda inició con una investigación por narcomenudeo en la zona Este de la Capital catamarqueña.
Supuestamente, la droga era arrojada en bultos desde un avión en el sur de Tucumán. Las coordenadas eras fijadas previamente. A través de un GPS el clan accedía a los paquetes que luego eran enterrados en una finca cuyo propietario viviría en Paraguay.
Según la información a la que se pudo acceder, el clan Paradi habría contado con la colaboración de Sandoval para el movimiento de la droga y su posterior comercialización.
Presuntamente la droga llegaba a Tucumán a través de un avión, proveniente de Paraguay.
Sandoval habría estado encargado de buscar la mercancía y ocultarla. Presuntamente los Paradi organizaban y coordinaban los envíos con el proveedor extranjero, con la utilización de teléfonos celulares y un GPS, que fue secuestrado.
Desde el sur tucumano el clan extendía su influencia a Catamarca, a través de la ruta nacional 38, y a Santiago del Estero.
Además, el líder de la banda habría sido Juan Alberto Paradi (h), conocido también como “bebote”, seguido de su padre y demás hermanos.
Supuestamente todos tenían acceso al lugar donde fueron hallados más de 270 kilos de marihuana, en panes compactados y enterrados a más de un metro de profundidad, en una finca.
Además de dedicarse a la venta al menudeo en Tucumán, también habrían sido proveedores de otros vendedores.
La noticia del secuestro de la importante cantidad de droga y la caída de los Paradi fue ampliamente replicada en los medios locales y nacionales.
