La situación procesal de los abuelos acusados de matar a una recién nacida desató una polémica en la Justicia provincial. Mientras una jueza ordenó que sean puestos en libertad por vencimiento de plazos procesales, otro magistrado resolvió la prisión preventiva por dos meses para ambos imputados.
El sábado 21 de septiembre, una vecina encontró en el patio de su casa el cuerpo de una recién nacida. Los informes médicos, que fueron confirmados luego por la autopsia que se le realizó a la beba, revelaron que la pequeña había nacido con vida y que había sufrido por golpes en la cabeza. En la investifgación se estableció que una adolescente de 14 años, que vivía en el fondo de la casa donde se produjo el hallazgo, había mantenido oculto el embarazo.
Luego de varios días de investigación, la fiscala Adriana Giannoni acusó a los abuelos de haber matado a la criatura y de haber arrojado el cuerpo a la vivienda de la vecina, después de que diera a luz la adolescente en el interior de la vivienda. El viernes la fiscala presentó el pedido a Facundo Maggio, juez natural de la causa, para que se les dictara la prisión preventiva de los abuelos al acusarlo de homicidio agravado por el vínculo.
Horas después, la defensora de los imputados, Soledad Deza, presentó ante la jueza Carolina Ballesteros un pedido de habeas corpus al entender que se habían vencido todos los plazos. La magistrada solicitó el expediente a la fiscalía interviniente, medida que no se pudo cumplir puesto que la documentación se encontraba en el despacho de Maggio.
Pese a ello, Ballesteros aceptó el planteo de la defensa de los imputados y ordenó que los dos recuperaran la libertad, previo a que cumplieran con una caución de $ 2 millones. Como el fallo se dictó el viernes por la tarde, no hubo tiempo para realizar los trámites correspondientes. El razonamiento de la magistrada, según confiaron fuentes judiciales, es que Giannoni se excedió en el plazo teniendo en cuenta la fecha de aprehensión y no la de declaración como imputado, como establece el Código Procesal Penal. El asunto debía haber sido resuelto por la Cámara de Apelaciones, no por un juez de Instrucción.
De casualidad
La polémica estalló cuando Deza, que ya había intentado recusar a Giannoni por la información del caso que publicaban los medios, presentó un escrito ante Maggio solicitándole que reduzca el valor de la caución con una copia de la resolución realizada por Ballesteros.
El magistrado, sin entrar en polémica, no coincidió con su par, al entender que el pedido de prisión preventiva fue realizado en tiempo y en forma. También determinó que la resolución de Ballesteros era abstracta y decidió dictar prisión preventiva para los dos imputados por dos meses.
Más allá de la resolución del juez competente, fuentes judiciales informaron que Giannoni apelaría la resolución dictada por la magistrada. La defensa, en cambio, no informó cuáles serán los pasos a seguir.
