La búsqueda del sumergible desaparecido cuando se dirigía al pecio del Titanic se ha convertido en una misión de investigación y salvamento que se prolongará por un tiempo indefinido, según las autoridades, mientras en todo el mundo se sucedían los homenajes a las cinco personas muertas por la implosión de la embarcación en las profundidades del Atlántico Norte. Y la pregunta que todos se hacen es por qué sucedió.
La investigación acerca de lo ocurrido ya estaba en marcha y continuará en las inmediaciones del Titanic, donde se encontraron los restos del sumergible, dijo el contraalmirante John Mauger, del Primer Distrito de la Guardia Costera.
“Sé que hay también muchas preguntas acerca de cómo, por qué y cuándo ocurrió esto. Son preguntas sobre las que recopilaremos toda la información que podamos”, afirmó Mauger, que indició que se trataba de un “caso complejo” en una zona remota del océano y que implicaba a varios países.
El primer indicio acerca de la posible cronología de los hechos se produjo el jueves en la noche, cuando un alto oficial de la Marina estadounidense dijo que poco después de que se reportó la desaparición del Titán el domingo, la Marina analizó los datos acústicos y halló una “anomalía” que era consistente con una implosión o explosión en las proximidades del lugar donde operaba la embarcación cuando se perdió la comunicación. El oficial habló bajo condición de anonimato para discutir un delicado sistema de detección acústica.
Presión submarina
El sumergible perdió contacto con su nave de apoyo aproximadamente una hora y cuarenta y cinco minutos después de iniciar su inmersión.
“La presión hacia el interior del submarino habría sido enorme”, dijo Luc Wille, profesor y catedrático de física en la Florida Atlantic University. Eso probablemente explica lo que parece haber sido la implosión del barco, dijeron Wille.
La presión en la profundidad cerca del Titanic es de casi 380 veces mayor que en la superficie, dijo Wille. Los buceadores entienden muy bien esto, ya que sienten la presión en sus cuerpos a medida que descienden y deben regular el aire que respiran en consecuencia.
“La gente siempre subestima ese impacto”, dijo Wille. Debido a que el agua es mucho más densa que el aire, “la presión se acumula mucho más rápido que cuando subimos o bajamos en la atmósfera”, agregó.
El buzo con la inmersión más profunda jamás registrada alcanzó los 332 metros. Los restos del Titanic están a 3.800 metros de profundidad. Los expertos dicen que la presión a esa profundidad es de 370 a 380 bares.
En el lugar donde está el Titanic, la presión equivale al peso de más de 300 atmósferas
Dudas sobre el casco
Un grupo de expertos le dijeron al medio estadounidense USA TODAY que al parecer el casco de la nave cedió, ya sea debido a un defecto o falla estructural, o a la fatiga de los materiales en el casco. Incluso el más mínimo defecto en el casco podría haber hecho vulnerable al Titan.
Cuando se presurizan repetidamente materiales como las paredes del submarino, “lo estás estresando”, dijo Wille. “Estás exprimiendo los átomos que componen el material, poniendo ese material bajo estrés y luego dejándolo ir”.
Incluso los submarinos militares de alto grado no deambulan por el océano a toda profundidad porque es demasiado peligroso, dijo al USA TODAY Eric Fusil, experto en submarinos y profesor asociado en la Escuela de Ingeniería Eléctrica y Mecánica de la Universidad de Adelaida.
Se necesitaría algo así como “20 milisegundos para aplastar un casco” en las profundidades en las que operaba el Titán, dijo Fusil. “Así que es casi instantáneo y es absolutamente muy, muy ruidoso”.
Aunque el casco compuesto del Titán está construido para soportar intensas presiones en aguas profundas, cualquier defecto en su forma o construcción comprometería su integridad y aumentaría el riesgo de implosión, dijo el profesor Stefan Williams, experto en robótica marina y embarcaciones submarinas de la Universidad de Sydney.
Los fallecidos: Stockton Rush, el director general de OceanGate Expeditions, la propietaria y operadora del sumergible; dos miembros de una importante familia paquistaní, Shahzada Dawood y su hijo Suleman Dawood; el aventurero británico Hamish Harding, y Paul-Henri Nargeolet, un francés experto en el Titanic.
Qué dijo OceanGate
OceanGate, que ha documentado la desintegración del Titanic y el ecosistema submarino que lo rodea en viajes anuales desde 2021, en los que participaban turistas de pago, indicó en un comunicado que los fallecidos eran “verdaderos exploradores que compartían un marcado espíritu de aventura y una profunda pasión por explorar y proteger los océanos del mundo”.
Los tributos a las víctimas y los elogios a los rescatistas que trataron de salvarlos llegaron desde todo el mundo. La Casa Blanca dio las gracias ala Guardia Costera, además de a sus socios canadienses, británicos y franceses que ayudaron en el operativo de búsqueda.
“Nuestros corazones están con las familias y los seres queridos de quienes perdieron la vida en el Titán. En los últimos días han pasado por un calvario horrendo, y los tenemos en nuestros pensamientos y oraciones”, indicó su comunicado.
El Ministerio de Exteriores de Pakistán dejó por escrito en Twitter su agradecimiento a “los esfuerzos multinacionales de los últimos días en la búsqueda de la embarcación”. La familia Dawood también dio las gracias a todos los que participaron en el operativo.
“Sus incansables esfuerzos fueron una fuente de fortaleza para nosotros durante este tiempo”, indicó la familia en su comunicado. “También estamos en deuda con nuestros amigos, familiares, colegas y simpatizantes de todo el mundo que nos apoyaron durante este momento”.
Por su parte, la familia de Harding afirmó que el aventurero “era único en su especie y le adorábamos (…) Lo que consiguió a lo largo de su vida fue realmente extraordinario y si podemos sacar algún pequeño consuelo de esta tragedia, es que le perdimos haciendo lo que amaba.”
El Titán partió a las 6 de la mañana del domingo. Su desaparición se reportó por la tarde, cuando estaba a unos 700 kilómetros (435 millas) al sur de St John’s, en Terranova. Los rescatistas llevaron de inmediato barcos, aviones y otros equipos hasta el lugar.
El momento en que el Titan inicia la expedición
Las autoridades esperaban que los sonidos submarinos detectados el martes y el miércoles pudieran ayudar a acotar la búsqueda, que abarcaba miles de kilómetros (millas), el doble del tamaño del estado de Connecticut, en aguas a 4 kilómetros (2,5 millas) de profundidad.
Todas las esperanzas de encontrar a la tripulación con vida se disiparon a primera hora del jueves, cuando se preveía que se agotase la provisión de oxígeno, y la Guardia Costera anunció que se habían encontrado restos a unos 488 metros (1.600 pies) del Titanic.
Los guardacostas señalaron después que los sonidos detectados los días previos habrían sido generados por algo distinto al Titán.
James Cameron, polémico
El director de cine James Cameron, que ha realizado múltiples inmersiones a los restos del Titanic, dijo en declaraciones a la BBC que supo que se trataba de un “acontecimiento catastrófico extremo” en cuanto se enteró de que el sumergible había perdido la navegabilidad y la comunicación a la vez.
“Para mí, no había dudas”, afirmó Cameron. “No había búsqueda. Cuando por fin bajaron un ROV (las siglas en inglés para vehículo operado por control remoto) que podía llegar a la profundidad, lo encontraron en cuestión de horas. Probablemente en cuestión de minutos”.
Para el cineasta, los reportes sobre las 96 horas de oxígeno disponibles y los ruidos fueron una “farsa prolongada y pesadillesca” que dieron falsas esperanzas a los familiares de los tripulantes.
Al menos 46 personas viajaron en el sumergible de OceanGate hasta los restos del Titanic en 2021 y 2022, según cartas de la compañía presentadas en una corte federal en Norfolk, Virginia, que supervisa asuntos relacionados con el naufragio del transatlántico. Pero tanto un antiguo trabajador de la empresa como ex pasajeros plantearon dudas sobre la seguridad del dispositivo.