El jefe de máquinas de un barco habría muerto por coronavirus mientras la embarcación hacía actividades de pesca en el Sur. La víctima es el jefe de máquinas de la embarcación Xin Shi Ji 89, se llamaba Manuel Quiquente y tenía más de 60 años. Hisoparon a seis compañeros de él que dieron positivo y están aislados arriba de la embarcación de bandera argentina, que amarró en Puerto Deseado en Santa Cruz. Prefectura custodia el lugar para controlar que nadie se baje, consignaron desde la fuerza federal.
Inicialmente Quiquente empezó a manifestar síntomas compatibles con COVID-19 y a los pocos días murió, aparentemente por esta enfermedad. Por la edad de la víctima estaba dentro de las personas consideradas en grupo de riesgo. El caso es investigado por la Justicia Federal.
Hisoparon a seis compañeros de Quiquente, que dieron positivo de coronavirus y están aislados arriba de la embarcación. Hay custodia de Prefectura en el lugar, para verificar que nadie se baje de la embarcación. De acuerdo al último reporte del Hospital Distrital de Puerto Deseado el sábado se detectaron 37 casos positivos (33 de marinería y cuatro locales) y se dieron 12 altas. Cinco personas permanecen internadas en sala común y una murió.
Reclamo para que trabajadores pesqueros reciban la vacuna contra el coronavirus
A principios de mes desde el sector reclamaron que a los trabajadores pesqueros les apliquen la vacuna contra el COVID-19. El pedido lo hicieron familiares del pesquero marplatense Repunte, que naufragó en junio de 2017 frente a las costas de Chubut y que terminó con diez muertos.
La abogada Lorena Arias dijo que adhieren al reclamo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a los gobiernos para que “consideren como trabajadores esenciales a las tripulaciones aéreas y a los marineros y los incluyan entre los grupos prioritarios para recibir alguna de las vacunas disponibles contra el COVID-19”. Aseguró que la Organización Marítima Internacional (OMI) describió “la situación que vivió la gente de mar durante todo el año pasado como una violación de los derechos humanos”.
Arias sostuvo que 45 países ya incluyeron a estos rubros entre los prioritarios pero que en la Argentina no se los vacuna “por no considerarlos esenciales”. Advirtió que las condiciones en las que se realiza la actividad pesquera “hace que no se puedan garantizar las medidas mínimas de higiene y atención médica adecuada”.
Se sumó al reclamo el Centro de Capitanes de Ultramar y Oficiales de la Marina Mercante. El titular del organismo Marcos Castro dijo que los trabajadores marítimos “constituyen el único colectivo que asume un riesgo adicional pues, en muchos casos, de producirse un contagio, podrían transcurrir varios días antes que los afectados puedan acceder a atención médica, en razón de la posición del buque y de condiciones climáticas”.