Desde que se implementaron las nuevas restricciones cambiarias, se produjo una especie de feriado cambiario virtual, ya que fue imposible en los últimos cuatro días hábiles el poder acceder a la compra de los USD 200 mensuales permitidos por el Banco Central. El problema yace en el hecho de que una medida instrumental como la de impedir el funcionamiento de los home banking, puede terminar afectando a los depósitos en dólares del sistema bancario.
En este contexto, hubo roces entre los bancos y el Gobierno debido a que la ANSES puso a disposición de las entidades financieras un link en el cual deben ingresar para verificar si una persona puede acceder o no a la compra de dólares, sin embargo, se negó a entregar la base de datos, cuya tenencia es a lo que aspiran desde el sector bancario. Al respecto, comunicaron que es poco práctico tener que analizar uno por uno los pedidos de compra de los ahorristas.
Esa es la razón del extenso feriado cambiario virtual que existe de hecho que podría continuar hasta que se encuentre una opción superadora. En estas horas, el propio el BCRA presionó a los bancos para que chequeen esos datos manualmente, no obstante, la respuesta fue que las entidades financieras consideran que ese proceso puede ralentizar la operatoria. En definitiva, no están apurados por vender a los ahorristas los dólares que poseen.
El problema es que nadie está entendiendo que la situación de la economía argentina es muy delicada como para generar escenarios aún más complejos por medidas que se toman, tal es el caso de lo descripto anteriormente. Esto amerita que se resuelva cuanto antes el ingreso al home banking para acceder rápidamente al cupo de USD 200 y evitar, de este modo, que se genere incertidumbre que, a su vez, derive en un peligro mayor.
Es decir, que una medida cambiaria se transforme en una corrida bancaria. Y es que, en estos momentos, hay unos USD 17.000 millones en depósitos en los bancos. El peligro radica en el hecho de que si no se restablece rápidamente la operatoria a través del home banking puede ocurrir que la gente decida retirar del sector bancario las divisas que atesora y guardarlas en el colchón o donde sea, pero lejos del sistema financiero.
Cabe recordar que ya en el mes de abril se produjo una suerte de corrida bancaria, apenas un par de semanas de comenzada la cuarentena a raíz de la pandemia mundial de coronavirus. Y es que la incertidumbre es el germen de todo posible empeoramiento que derive en un caos económico, como el que significaría que salgan del sistema los depósitos en dólares de los bancos, ya que, de producirse la corrida, se caen automáticamente las reservas.
Las cuales, ya de por sí son escasas y que continuaron perdiéndose, a cuentagotas, pero perdiéndose al fin, a pesar de la implementación del nuevo cepo. Y es que estas restricciones no son más que una medida instrumental para ganar tiempo, pero que no sirve de nada si no se toman medidas de fondo. Por el contrario, si el medio se convierte en un fin en sí mismo, podría derivar en consecuencias que provoquen una crisis mayor.
