Una empleada de seguridad privada fue herida de un balazo en la tarde del domingo al ser atacada por dos hombres en el interior del Hospital Centenario de Rosario, según consignaron fuentes policiales en la tarde del domingo. Los agresores huyeron del lugar tras cometer el ataque y son buscados por la policía.
El incidente ocurrió pasada la 13 en la capital santafesina, cuando dos personas ingresaron al Hospital Centenario, ubicado en Urquiza al 3000 de Rosario, y se dirigieron directamente hacia donde se encontraba la mujer. En este momento, la empleada de seguridad les preguntó a dónde iban.
Testigos que desempeñaban tareas en el establecimiento señalaron que, sin mediar palabra, uno de los sujetos que portaba un arma de fuego le disparó a la custodia a quemarropa. La mujer, que recibió una herida de poca gravedad en el hombro, salió corriendo segundos después del ataque.
El tenso episodio fue captado por las cámaras de seguridad del establecimiento hospitalario. Luego de salir del cuadro, la empleada de seguridad se desplomó y fue rápidamente fue asistida. Mientras tanto, los dos atacantes se daban a la fuga en un vehículo.
“Se desconocen todavía los motivos del ataque y por fortuna no hubo que lamentar más personas heridas”, sostuvieron desde el Hospital Centenario. Aun así, y según precisó La Capital, entre los pasillos del establecimiento existían algunas versiones que explicaban lo sucedido.
Una de ellas indicaba que el tirador era un hombre que había tenido un problema en neonatología, se retiró del hospital pero enseguida volvió, mantuvo una discusión con alguien -no fue aclarado si se trataba de la misma mujer a la que disparó más tarde- y terminó por cometer el delito.
Otro de los interrogantes que todavía no fue posible esclarecer es la cantidad de disparos efectuados. La víctima, respaldada por las imágenes, afirmó que fue solo uno Sin embargo, en la escena del hecho se encontraron dos vainas servidas calibre 380, un cartucho intacto calibre 9 mm y una bala de plomo.
La investigación se encuentra ahora en manos de la fiscal Andrea Vega, quien por el momento ordenó solamente la intervención del gabinete criminalístico de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) para que de lugar a las primeras averiguaciones que permitan entender lo que pasó.
