El Estado remató en más de 70 millones de pesos, unos 350.000 dólares blue, un departamento de dos ambientes en Puerto Madero que había adquirido Daniel Muñoz, exsecretario de Cristina Kirchner, para lavar, según la Justicia, parte de los 70 millones de dólares que integraron su patrimonio.
En total, Muñoz compró un centenar de inmuebles y empresas en el país, en Nueva York, en Miami y en las islas Turcas y Caicos.
El inmueble de Puerto Madero se vendió después de cinco subastas que habían sido declaradas desiertas. Está ubicado en el tercer piso del edificio de Julieta Lanteri 1331, tiene 100 metros cuadrados y cuenta con un estar principal con balcón hacia el parque Micaela Bastidas, una cocina integrada y un baño toilette. Además, en el contrafrente tiene el baño principal y un dormitorio con terraza.
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El edificio cuenta con seguridad y amenities, además de baulera y cochera.
Si bien restan procesos administrativos para su adjudicación y escritura, la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), dirigida por Martín Cosentino, logró concretar la venta a un vecino. Para tentar oferentes, la AABE ofreció un plan de pagos. Se podía abonar el 10% del valor del inmueble a los diez días de haberse celebrado la subasta, otro 10% a los 30 días de la notificación del acto administrativo y, finalmente, a los 90 días el 80% restante.
La única oferta fue hecha por Carlos Garibotti y Griselda Ghiggeri, quienes abonarán por el departamento de dos ambientes 70.600.000 pesos.
La subasta, al igual que en otras ocasiones, se realizó mediante el portal Compras Públicas de la República Argentina y es la Agencia de Bienes del Estado quien se encargo de publicar en su página web todos los procesos en curso.
La ley prevé que luego de ser subastado, “el producto de la venta o administración de los bienes” sea destinado a una cuenta especial del Tesoro Nacional para financiar el funcionamiento de la Unidad de Información Financiera (UIF), los programas contra el tráfico de drogas, programas de salud y capacitación laboral.
El inmueble quedó a disposición de la Justicia en el marco de la causa de los cuadernos de la corrupción, junto con otros 30 bienes decomisados. Fue transferido al Estado el 16 de agosto de 2019 en la causa “Muñoz, Héctor Daniel y otros s/ asociación ilícita”, del juzgado que estaba a cargo del fallecido Claudio Bonadio y que hoy subroga Julián Ercolni.
Las propiedades del fallecido Daniel Muñoz, secretario privado de los Kirchner entre 2003 y 2009, suman 113 inmuebles, solo en la Argentina, que incluyen dos estancias en Santa Cruz (una de ellas de 20.000 hectáreas), complejos de cabañas en Villa la Angostura, El Calafate y San Martín de los Andes, inmuebles en Río Gallegos, edificios de cocheras, y casas y departamentos en Buenos Aires, según la nueva información que recibió la justicia.
Estos nuevos datos fueron recogidos por el juez Ercolini, que tiene a su cargo un desprendimiento del caso de los cuadernos de la corrupción no elevado todavía a juicio oral.
En el caso de los cuadernos, el chofer Oscar Centeno contó como recogían coimas de empresarios en bolsos con dinero y en ocasiones lo llevaba el propio Daniel Muñoz al departamento donde vive actualmente Cristina Kirchner en la Recoleta.
Asimismo, ya se habían detectado 16 inmuebles en Miami, incluidos lujosos condominios, y dos departamentos en el Plaza Hotel de Nueva York, por los que se pagaron 14 millones de dólares. Estos inmuebles fueron liquidados tras la muerte de Muñoz, en 2016, y su viuda, Carolina Pochetti, con un grupo de abogados ideó la construcción de un complejo turístico en un terreno costero de 16 hectáreas en las islas paradisíacas Turcas y Caicos, para construir un inmenso resort de playa. Estuvo asesorada por Isidro Bounine, otro exsecretario de los Kirchner.
La citación de Manzanares
El juez Ercolini recibió nueva información sobre la trazabilidad del dinero usado para la compra de los inmuebles en la Argentina y las inversiones en Turcas y Caicos y citó nuevamente a prestar declaración indagatoria al excontador de los Kirchner Víctor Manzanares como el diseñador de parte de esta ingeniería financiera, que le permitió a un personaje de cuna humilde como Muñoz, invertir mas de 70 millones de dólares en el extranjero en fideicomisos y sociedades offshore y adquirir en la Argentina estos 113 inmuebles.
La lista de propiedades, autos, maquinas viales, camiones, pickups, camionetas importadas, autos de alta gama, hoteles, terrenos, departamentos, cabañas, y estancias ocupa 209 páginas tamaño A4, cuerpo 12, en el expediente judicial.
Los investigadores sospechan que estos fondos no eran una “mexicaneada” de Muñoz, sino que el secretario adjunto, luego secretario privado del Presidente de la Nación y luego asesor presidencial con cargo y jerarquía de secretario, podía ser el testaferro de alguien más.
En muchas de las inversiones realizadas por Muñoz y su círculo hay un notorio incremento entre los valores declarados en el momento de comprar y aquellos por los que fueron vendidos los bienes. En buena parte se mencionó que las operaciones se hacían en efectivo.
