Un nuevo 24 de marzo convoca a la sociedad toda, a través de marchas, actos, y conmemoraciones; por redes, o medios periodísticos, todos, con una posición política. Los partidos políticos, tienen sus posiciones, y sus hombres partidarios, la toman también, hasta los que callan tienen posición tomada. Se conmemora la toma del poder político por medio de la fuerza por un gobierno de Facto, que destituyo la Democracia, desarticulo el sistema legislativo, mutilando una parte de la República, cerrando los partidos políticos por el orden de la fuerza.
No había garantías constitucionales, el derecho de ser elegido, estaba vedado, los partidos no podían expresar sus opiniones como parte de un pueblo, ni el pueblo elegir representantes que manifiesten su pensamiento. Fue un 24 de marzo, que con el nombre de una RE Organización Nacional, se trajo una división a nuestra sociedad, que continúa hasta el día de hoy.
Un inmenso sector exige Memoria, para que se recuerde siempre aquellos acontecimientos; todavía se buscan y en algunos casos se encuentran personas desaparecidas; esos nietos que sus familias siguen buscando; los hijos de sus hijos/ as. Otros, pudieron rescatar los restos de sus seres queridos, saber el destino que ellos tuvieron, fortaleciendo el vínculo por medio del recuerdo; a modo de consuelo. En nuestra fuerza partidaria, personas que militaron junto a nosotros desde nuestra juventud, siempre hablaban de sus padres ausentes; tanto Rubén Chebaia como la querida Tata Pisarello, conocieron el largo camino de vivir con ese vacío en sus hogares y sus vidas familiares, vaya nuestro sentido homenaje a esas familias, que vivieron el dolor que atravesó la sociedad, en primera persona.
Pero también hay otro 24 de marzo, distinto, donde se daba pleno espacio en tiempo y lugar para la construcción de la Patria. En el año 1816, en la ciudad histórica de San Miguel de Tucumán, tierra del sepulcro de la tiranía por su Victoria inigualable del aquel histórico 24 de Setiembre de 1812, iniciaba sus sesiones el Congreso que declararía el 9 de julio de 1816, la independencia de las provincias unidas de Sudamérica.
Es importante LA MEMORIA, porque si el pueblo como raíz nacional, hubiese tenido consciencia de la fortaleza que representaban esas fechas, su identidad nunca hubiese sido mancillada; menos aún hablar de una “Reorganización Nacional”. Ante la organización que daba el Congreso de Tucumán: la Independencia de la Provincias Unidas de Sudamérica, definir los colores de la bandera que hoy llevamos como símbolo Nacional; hasta la expresión “Sepulcro de la tiranía” lo que sucedió en 1976, no respetaba la Patria. Algunos tucumanos creemos que no solo taparon las fechas elegidas por los padres de Nuestra Patria, sino que también se llevaron expresiones de ellos, para sus posiciones personales, y todo en nombre de un hecho que hasta internacionalmente se aborrece y se condena. Pero he ahí, que debemos recordar a nuestros militantes y dirigentes partidarios, que debemos atrincherarnos en nuestra propia memoria, y para ello debemos tener dirigentes que nos convoquen a la misma.
La UCR, debe tener presente la memoria de nuestros dirigentes, y debe porque puede, marcar la diferencia de aquella división, ya que venida la Democracia, en los cuarteles donde a Raúl Alfonsín, hombres como Rico que se llamaron caras pintadas, quisieron llevar al gobierno democrático en salto de ranas por pedido de alguien, que luego pago por los servicios “patriotas”, dando al “cara pintada” la representación de la provincia de Buenos Aires por el menemismo en la Cámara de Diputados de la Nación. Personas que, como Aldo Rico, aprovechando los caminos de la democracia, desdibujaron su participación golpista, o como su amigo Galimbertti, entre otros, quienes con la llegada del menemismo encontraron impunidad para contar una nueva historia sobre sus acciones antidemocráticas, son las personas que hoy encontramos con otros rostros y en muchos casos las mismas de entonces, en el gobierno nacional, destruyendo al Estado y entregando la Nación a sus patrones extranjeros.
Nuestro centenario partido debe sostener la libertad de Monteagudo, el hombre que tenía clara la distribución de los impuestos, y más claro todavía el sistema de parlamentos en nuestras Provincias Unidas de Sudamérica; se lo debe rememorar con estos conceptos más allá de que al día de hoy no tengamos definida en forma clara la representación del Parlasur (representantes de la América unida) ni una coparticipación definida y respetada por los gobiernos centrales; esos gobiernos que hoy actúan sin presupuesto definido, pero con la total presencia del FMI en las políticas económicas de nuestro pueblo. No existe discusión en las convenciones o congresos partidarios como partido político, solo hay posiciones individualistas, personales.
Habrá que conformar movimientos políticos para exigir las aperturas democráticas en las vidas internas de los partidos, para tener legítimos representantes por elección de los afiliados que representen con honor al pueblo, que respete y cumpla con la posición tomada por el partido que representa, y no con posiciones personales, al decir de Yrigoyen “políticas logreras de las bandas que se reparten el país”. Porque nacimos en contra de las bandas enquistadas en nuestra Patria; nacimos con la idea de unir la civilidad de la patria, para sostener políticas federales y populares. Los que tengan una mirada dependiente y recortada de la historia, les recuerdo que las políticas populares y de vanguardia en el mundo como la extracción del petróleo que implementó Yrigoyen, sosteniendo que los subsuelos son propiedad del Estado, sin ceder nuestra independencia e identidad, le costó el primer golpe de la historia del país, años después corrió con la misma suerte Humberto IIlia, momento en el que se cerraron ingenios y dando fuerza a la oligarquía conservadora con respecto a la producción del azúcar.
Las interrupciones a los gobiernos políticos llevaron hambre y desocupación a los pueblos, creando ciudades como el conurbano bonaerense, un monstruo social, que al día de hoy tiene condiciones para ser desarrollado. Nuestra historia tendrá en cuenta a los legisladores que tratan los destinos de la nación respondiendo a intereses individuales, porque son elegidos a dedos por una comisión conformada en partidos personales.
Es un camino sin regreso, que en los partidos populares sean elegidos por medios de elecciones partidarias para decidir, el futuro de nuestra Patria.
¡¡¡Representantes del pueblo más que de un partido personal!!! Ni Kirchneristas, ni Mileistas.
Con orgullo Radicales.
Gustavo Italo Yanicelli – D.N.I: 16.216.828
Mgtr. Ariel García – D.N.I 23.517.945
Jorge Mendía – D.N.I: 14.352.156
Lic. Agustín Romano Norri – D.N.I: 33.163.348
Roque Antonio Mendía – D.N.I: 13.784.754
Dr. Federico Romano Norri – D.N.I: 12.598.746
Luis Enrique González – D.N.I: 16.122.126
Dr. Federico “Cucho” Romano Norri – D.N.I: 30.759.266
Mario Ezequiel Luna – D.N.I: 27.730.334
Marcelo Altamiranda – D.N.I:18.463.582
Teresita Villavicencio – D.N.I: 24.803.069
Leticia Pacheco – D.N.I: 22.129.073