El Banco Central (BCRA) logró recomprar hoy otros US$101 millones para sus muy necesitadas reservas, con lo que acumuló en la semana un saldo positivo por sus intervenciones sobre el mercado cambiario oficial algo más de US$300 millones, el mayor para un lapso similar en lo que va del año.
El resultado está directamente vinculado al aumento que mostraron las liquidaciones vinculadas al Programa de Incentivo Exportador III (PIE), que treparon más del 28% en relación a la semana anterior (de US$444 millones a casi US$566 millones, considerando los US$150,9 millones ingresados hoy), algo que en el mercado juzgan vinculado con la tendencia a la baja que siguen mostrando los precios de los granos -actuales y proyectados- en los mercados internacionales. “Comenzó a funcionar el temor a vender por menos en adelante, lo que dio impulso a la oferta”, comentaron en el mercado.
Los números dicen que, en la jornada, la entidad que comanda Miguel Pesce se quedó con casi el 67% de los dólares liquidados a $300 o el 32,5% del total de US$ 310,811 millones operados hoy en el segmento de contado. Además, con la compra del día, pasa a mostrar un saldo positivo por su intervenciones sobre el mercado en torno a los US$150 millones en lo que va del mes, aunque mantiene a la vez un rojo del orden de los US$2800 millones en lo que va del presente año.
La nueva recompra, undécima consecutiva, llegó en una jornada en la que la entidad habilitó un aumento de $0,65 para el dólar mayorista, que cerró a $232,35/232,75 por unidad, para compra y venta respectivamente sesenta y cinco centavos arriba del cierre de ayer. De este modo “en la semana que acaba de finalizar el tipo de cambio mayorista subió $3,55, por encima de los $2,95 de aumento registrado en la semana anterior”, hizo notar el analista y operador Gustavo Quintana, de PR Cambios.
De esa manera, parecen haber quedado descartadas las especulaciones en torno a un menor ritmo de ajuste devaluatorio del peso, surgidas tras la reunión que el equipo económico mantuvo el último sábado, ya que se mantuvo un crawling peg en el orden del 6,5/7% mensual, aunque sigue siendo menor a la inercia inflacionaria que muestra la economía.
La racha compradora de reservas se consolidó luego de otra racha fuertemente vendedora (inédita en tiempos de dólar soja), aunque más corta, en la que había cedido US$474 millones de sus reservas netas al cabo de apenas seis ruedas. Si se toma en cuenta ese egreso -producido sólo por intervenciones directas sobre el mercado entre el 26 de abril y el 4 del corriente- al BCRA le estarían faltando sumar unos US$48 millones más sólo para equilibrar esa pérdida.
El vuelco del mercado se produjo no casualmente el 5 de mayo, fecha en que una actualización de los datos de balance obligó al BCRA a reconocer que su tenencia neta de reservas estaba en terreno negativo.
De allí en más, la entidad se preocupó por reportar saldos de intervenciones positivos cada día (algunos incluso destacados mediante la divulgación de comunicados, como el de hoy), cuestión que logró en principio “por más cepo informal”, sostiene el economista y consultor Fernando Marull, algo que quedaría “blanqueado” con los nuevos recortes a la demanda aplicados por vía de la Comunicación “A” 7766 que vería luz el jueves 11.
Por el momento, no sirvió para evitar que el BCRA siga mostrando una tenencia de reservas neta negativas (en unos US$1500 millones calcula por caso la consultora 1816) ni detuvo la tendencia a la baja en sus reservas totales (brutas) que cerraron ayer en US$33.132 millones, lo que supone un nuevo mínimo en casi siete años, ahora que a la erosión en dólares sumaron la erosión en yuanes, ahora que se autorizó el pago de importaciones provenientes de China con esa divisa.
