En el estadio de Sarmiento de Resistencia, el habitualmente áspero duelo de entrenadores entre Marcelo Gallardo y Sebastián Beccacece quedó para River Plate. Y con holgura. El Millonario goleó 4-0 a Defensa y Justicia y avanzó a los cuartos de final de la Copa Argentina, instancia en la que se probará ante Patronato de Paraná. Pablo Solari fue figura descollante, con tres conquistas. Lucas Beltrán anotó el tanto restante en un equipo que fue muy superior, sobre todo en la segunda etapa, más allá de que, como lunar, le generaron varias chances de gol.
El cotejo se inició a todo ritmo, con Defensa planteando una disposición de 3-5-2 (o 3-4-3) para buscar lastimar a espaldas de los laterales del Millonario, que pasan mucho al ataque. En los primeros compases amagó con imponerse, pero la jerarquía de los dirigidos por Gallardo marcaron diferencia a los tres minutos de juego. De la Cruz presionó a Gutiérrez y robó, Quintero filtró para Solari, la defensa del Halcón no hizo pie y el ex Colo Colo definió cruzando para rubricar el 1-0.
Cada vez que River presionó con coordinación y robó alto, lastimó. Como a los 17′, cuando Beltrán tocó atrás y De la Cruz tiró desde la puerta del área y su intento pasó junto a un palo. En cada destello de Quintero, descansó el elenco de Núñez.
Pero con el correr de los minutos, Defensa creció, con despliegue físico y movilidad. A los 21′, Duarte, de media distancia, asustó a Armani. A los 23′, Gabriel Alanís llegó a fondo por derecha, sacó el centro rasante y Herrera cruzó providencialmente.
No obstante, River exprimió cada facilidad. Y a los 29′ amplió la ventaja. Casco simplificó su intervención en un solo movimiento y abrió para De la Cruz, quien desbordó, cedió al centro y Beltrán, aún con un remate imperfecto, batió a Unsain: 2-0.
Defensa cerró la primera etapa merodeando el descuento. A los 36, un intento de Gutiérrez forzó la atajada de Armani. Y a los 43, un cabezazo franco de Analis salió apenas desviado. Y hubo un momento de tensión cuando Marco pisó a un intratable Solari y los dos planteles se trenzaron.
El inicio del segundo tiempo ofreció una sorpresa: la salida de Franco Armani, lesionado (su lugar lo tomó Ezequiel Centurión). En River no impactó: saltó al césped con la intención de evitar la zozobra. A los 20 segundos ya había legado a fondo, con la doble tapada de Unsain a Solari y Quintero.
A los dos minutos, Juanfer, de tiro libre, obligó a la atajada del portero. Y a los tres llegó el 3-0: Beltrán corrió 35 metros, cedió para Solari, y el punta cordobés resolvió con calidad. La contundencia y el peso de tres cuartos en adelante, la diferencia que subrayó la Banda en Resistencia.
A pesar de la sensación de llave definida, Defensa mostró vergüenza deportiva y continuó buscando, al punto de que inquietó con el juego aéreo y con la entrada de Alanis que rechazó Centurión.