En una audiencia judicial realizada este lunes, se formalizó la imputación contra “Peke”, el sujeto que el viernes 10 de diciembre ingresó en una cancha de fútbol del barrio Obrero, en La Cocha, y empuñando un arma de fuego asaltó a uno de los participantes a quien luego exigió que encendiera su motocicleta y lo condujera hacia la ruta 38.
El acusado había sido aprehendido minutos después del hecho cuando la víctima se detuvo en la puerta de una verdulería y alertó lo que estaba ocurriendo.
Durante la audiencia, la auxiliar fiscal Paula Bellomío relató los hechos endilgados al joven malviviente a quien le imputó el delito de robo agravado por el uso de arma en grado de tentativa, en carácter de autor.
Luego solicitó la prisión preventiva para el mismo por cuatro meses.
Entre sus fundamentos, la representante del MPF hizo mención a los antecedentes del imputado y la necesidad de cautelar el proceso teniendo en cuenta las características el hecho y la pena que se espera como resultado del mismo.
El juez interviniente hizo lugar al pedido de la fiscalía.
El día 10 de diciembre, cerca de las 21.30 horas, un joven estaba por jugar un partido de fútbol en la cancha del barrio Obrero de la ciudad de La Cocha, cuando de pronto apareció el imputado “Peke”, quien ingresó al campo y comenzó a trotar para aparentar que también era parte del juego.
Al pasar cerca de la víctima, el acusado sacó un arma de fuego y apuntándole en la espalda le exigió que le entregue su teléfono celular.
Luego de ello le pidió le entregara las llaves de la motocicleta, la cual estaba estacionada en la parte de adentro de la cancha. Ante eso el joven le respondió que las llaves estaban dentro de su mochila.
El malviviente continuó apuntándole con el arma por la espalda y bajo amenazas le dijo que camine hasta donde estaba el vehículo.
“No te muevas que te vuelo de un tiro”, le dijo el imputado y, una vez allí, lo obligó a arrancar la moto, subiéndose en la parte de atrás.
Una vez arriba de la misma, le exigió que conduzca hacia ruta 38 en dirección a Alberdi.
Finalmente, el joven se pudo librar del asaltante cuando en el trayecto dobló de forma brusca en una esquina y pidió auxilio en la verdulería de un amigo.
En ese momento, el acusado saltó de la motocicleta, tiró el teléfono de la víctima al pavimento y huyó no pudiendo lograr su cometido, siendo aprehendido por personal policial de la zona.
