Una nueva tensión se instaló en Juntos por el Cambio (JxC) desde que se reflotaron las intenciones de incorporar a Fuerza Republicana (FR) a la alianza opositora. El espacio que lidera el legislador Ricardo Bussi es severamente resistido por un sector del radicalismo, mientras que otra rama del partido centenario tiene una mirada más amplia y trabaja para que esté dentro del frente. El Partido por la Justicia Social (PJS) que encabeza Germán Alfaro también lo quiere como socio político, pero internamente encuentra resistencias.
El apellido Bussi genera controversias, pero nadie niega que tiene un caudal de votos más que interesante (¿y necesario?) para pelear por la Gobernación. Por eso Sebastián Murga no tuvo dudas y se expresó tajante ante tanta controversia: “muchos no lo dicen, pero todos quisieran tener a Bussi de su lado”.
El flamante compañero de fórmula de Roberto Sánchez (UCR) mantuvo semanas atrás un encuentro con Bussi para intentar acercar posiciones y sumarlo al armado opositor. “Quiero ganar las elecciones provinciales del año que viene. Siempre hemos hecho lo mismo y siempre hemos perdido. Esta vez quiero hacer una receta distinta para ver si tenemos un resultado distinto, que es ganar. Me parece que Fuerza Republicana tiene que ser parte de este armado opositor, porque necesitamos de todos para poder ganar”, desarrolló a LA GACETA.
Cuestión de sensibilidad política
El ruralista y referente de CREO dijo que se deben dejar de lado los personalismos, porque eso ha llevado a un fracaso enorme. Además, puso en valor los casi 10% que tracciona FR en cada comicio. “Si uno de nosotros (los partidos opositores) no está resulta muy difícil obtener un triunfo. Me parece que Fuerza Republicana es un partido que representa a miles de tucumanos desde hace muchos años. Viene con un caudal de votos que nos indica que hay mucha gente que se siente identificada con el partido. Quiero que esté de lado de nosotros para ganar. Muchos no lo dicen, por una cuestión de sensibilidad política, pero la realidad es que todos quisieran tenerlo de su lado. Los referentes quisieran tenerlo como aliado para que esto resulte menos difícil. Tiene que estar en el armado opositor, porque lo que tenemos en el frente es brutal”, expresó.
Murga está convencido de que la alianza JxC debe ser amplia. En ese sentido, aseguró que él mismo se encargará de llamar y convocar a los partidos opositores que, por una cosa u otra, no han sido parte de Juntos por el Cambio. “Quiero una alianza grande y generosa. Hay que ver ahora si realmente somos grandes y generosos”, planteó.
“La intención mía es hablar con todos. Yo voy a hacer el intento. En mi concepción no hay nada más que ganar las elecciones, nada está por arriba. No hay segundo digno puesto, acá sirve ganar. Algunos anteponen su proyecto personal ante todo esto. Para mí se construye desde arriba hacia abajo”, remarcó el referente de CREO.
Contrapunto radical
En la reunión de la mesa política de JxC se acordó fijar el 15 de diciembre como fecha límite para firmar el acta de constitución del frente electoral. No se tocó el tema Bussi, pero quienes se oponen a su inclusión lo dejaron en claro ante la prensa. “No hemos hablado de limitaciones ni nada que se le parezca. Mi partido, en su Convención, resolvió que nosotros no aceptamos la participación de Fuerza Republicana”, había declarado el legislador José Ricardo Ascárate.
En un sentido similar al parlamentario se manifestó la ex diputada y vicepresidenta de la UCR, Silvia Elías de Pérez, aunque sin nombres propios. “La Convención de mi partido ha sido clara. Hay una vocación frentista (…) y ha quedado claro que es con todos los partidos de raigambre democrática. Ese es el límite que ha puesto la convención y dentro del que podemos movernos nosotros”, dijo.
La Convención de la UCR, que preside Raúl Moreno, se manifestó a fines de septiembre para abrir una convocatoria para “a todos los sectores políticos y sociales, con profundas convicciones democráticas, para ser parte de un espacio alternativo en Tucumán”. Antes de la votación, algunos convencionales pidieron que se convoque “a todos los partidos menos a uno”, en alusión a Fuerza Republicana. Moreno consideró que la postura estaba lo suficientemente clara, y se votó tal como se redactó.
El ex concejal José Luis Avignone remarcó su oposición a que la UCR comparta una alianza con Fuerza Republicana. “Algunos insisten en incorporar a Bussi, pero ya se le dijo que no en la Convención radical”, expresó.
Otros, como el intendente de Yerba Buena, Mariano Campero, insistió con que JxC debe tener una visión de amplitud, que incorpore a todos los espacios y también a los sectores privados. Desde los últimos comicios viene trabajando para que FR sea parte del armado opositor.
“Una suma que no suma”
En las últimas horas, autoconvocados de JxC se sumaron a los cuestionamientos y rechazos contra la posibilidad de un acuerdo con FR. En un comunicado titulado “el agua limpia más agua de cloacas será toda agua podrida”, expusieron que una alianza de ese tipo es “una suma que no suma”. “Una alianza electoral que incluya un apellido Bussi es, cuanto menos, disruptiva y nos complica y erosiona en un momento que pretendemos políticos con transparencia, compromiso, buena gestión y honestidad. Entonces hoy esa discusión debería ser evaluada como de alta incidencia para nuestro futuro, y no sólo para escudriñar nuestro pasado reciente y oscuro”, plasmaron.
Los dirigentes autoconvocados opinaron que tampoco es recomendable formalizar acuerdos políticos con una persona con “preocupantes” causas judiciales, que ha reivindicado el rol desempeñado por el proceso militar y que “fuera puesto en evidencia como un servil operador del oficialismo gobernante”. El texto lleva las firmas de José Ganim, Malila Rosig y Rubén Ceballos, entre otros.
Bussi, quien reconoció diálogos con diferentes actores de la alianza, aseguró que todavía cuenta con una vocación frentista y que se lo hizo saber a Murga. De todos modos, recalcó que Fuerza Republicana desde 2015 intenta ser parte de Juntos por el Cambio”, pero que el radicalismo siempre les puso “bolilla negra”. “Hasta que no se esclarezca un poco la situación, nosotros no vamos a pronunciarnos ni intervenir”, expresó el legislador a LG Play.