El día sábado, en una vivienda de la localidad de Yerba Buena, en el departamento Simoca, se concretó un allanamiento que culminó con el secuestro de una importante cantidad de drogas que eran comercializadas por miembros de una familia. A la llegada de los uniformados en el lugar había compradores que acababan de adquirir estupefacientes.
El subdirector de la Dirección Drogas Peligrosas Oeste, subcomisario Ricardo Nacusse brindó detalles de las tareas investigativas y su resultado.
“En la localidad de Yerba Buena, hemos culminado una investigación que se viene realizando desde hace ya un mes, y finalizó con el secuestro de una importante cantidad de marihuana compactada, (más de medio kilo); como así también se secuestraron dosis de cocaína de alta pureza; una piedra compactada de cocaína y elementos que tenía esta familia para fraccionar y vender a los jóvenes que llegaban al lugar”, precisó Nacusse.
“También se secuestraron balanzas con restos de las sustancias y una importante cantidad de dinero en efectivo. Al momento de la llegada al domicilio se encontraban tres compradores que tenían su dinero en la mano e incluso uno de ellos, ya había adquirido marihuana y psicofármacos”, detalló el subcomisario, al tiempo que informó que en la vivienda también se produjo el secuestro de un automóvil y una motocicleta que eran usados para el reparto de los narcóticos.
De acuerdo con lo informado por las autoridades de la DIDROP Oeste, los responsables de este kiosco de venta de drogas serían un tal Tuta y su padre, quienes ya poseen antecedentes penales y relacionados con infracción a la Ley de Estupefacientes.
Asimismo, en el fondo de la vivienda los uniformados hallaron 12 gallos de riña malnutridos y deshidratados, cuyo hallazgo fue comunicado a la fiscalía especializada y a la Dirección General de Delitos Rurales y Ambientales, de esta manera la Justicia ordenó rescatar las aves de inmediato.
Lo secuestrado:
Una piedra de cocaína de máxima pureza, 42 gramos (500 dosis); un envoltorio compactado de medio kilo de marihuana (500 dosis); dos balanzas de precisión con restos de cocaína; 220 semillas de cannabis sativa; 12 comprimidos de alprazolam; 160.500 pesos;13 teléfonos celulares; una computadora; recortes plásticos y tijeras; una motocicleta, un automóvil; 12 gallos de riña y dos jaulas.
