Despejando parcialmente la incertidumbre que se prolonga desde febrero, la cámara Federal de Mar del Plata confirmó este lunes “provisoriamente” al juez federal de Dolores Alejo Ramos Padilla al frente del expediente en el que se investiga una supuesta asociación ilícita dedicada a la extorsión y el espionaje ilegal por la que se encuentra detenido el falso abogado Marcelo D’Alessio.
Atendiendo a la apelación del fiscal del caso, Juan Pablo Curi, avalada por el fiscal general de Mar del Plata, Juan Manuel Pettigiani, el tribunal dice que Ramos Padilla “debe disponer con la celeridad que el caso impone la realización de todas aquellas medidas procesales tendientes a una integral determinación de los hechos que constituyen el objeto del proceso”. Es decir que la investigación debe clarificar cuáles son los supuestos delitos cuya autoría se busca establecer y donde se cometieron.
Recordemos: el caso comenzó con la denuncia de una supuesta extorsión por parte del empresario agropecuario Pedro Etchebest, quien acudió al juzgado de Dolores pues dijo haber asistido a un encuentro de D’Alessio -quien supuestamente le pedía dinero para borrar su nombre de la causa de los cuadernos de las coimas- con el fiscal de ese caso, Carlos Stornelli, en una confitería de Pinamar.
Ramos Padilla llamó cuatro veces a indagatoria a Stornelli y ante su negativa lo declaró en rebeldía. El fiscal del caso de los cuadernos de las coimas, incluso Curi y Pettigiani, pueden presentar ahora un recurso ante la cámara nacional de casación penal. Pero la causa, la tendrá Ramos Padilla.
Ese hecho -y sólo ese- unía a su denuncia con el juez Ramos Padilla, quien desde febrero realizó varios allanamientos, detuvo a D’Alessio, los ex policías bonaerenses Ricardo Bogoliuk y Aníbal Degastaldi y el ex espía de la AFI Rolando Barreiro, tomó decenas de declaraciones indagatorias y testimoniales, y en el transcurso de esa investigación aquella extorsión con un episodio en Pinamar derivó en una megacausa por espionaje ilegal.
Por eso mismo, los jueces marplatenses Alejandro Tazza, Eduardo Jiménez y Bernardo Bibel -quienes votaron por unanimidad- advirtieron en su fallo que dejan el caso en Dolores porque allí se inició, “sin perjuicio de que la cuestión pudiera ser reexaminada en la forma y términos que pudieran corresponder” en el futuro. Bibel es el juez federal de Necochea que fue convocado para votar si había empate.
Para el tribunal, “la incompetencia devendría prematura en virtud del estado embrionario de la investigación en curso y por no contarse con el análisis de todos los elementos de juicio relevantes para precisar debidamente el contorno delictivo investigado”. Es decir, el tribunal apoyó el principio subsidiario del juez que investigó primero y no la jurisdicción de los hechos que se investigan, ocurridos en su mayoría en la Capital Federal.
Según la Cámara, las pruebas reunidas “no permiten establecer -por el momento- el lugar donde se habrían configurado tales ilícitos, en razón de que la hipótesis inicial de investigación no se encuentra todavía acotada a la totalidad de los ilícitos que aquí se investigan”.