El anuncio de una nueva suba de las tasas de interés generó dudas entre los pequeños ahorristas que, con un 46% nominal anual, comienzan a mirar de reojo al plazo fijo tradicional.
Con una inflación que podría superar el 60% este año, una cotización retrasada en el mercado cambiario, al que se puede acceder con restricciones o de manera paralela, las inquietudes pasan por resguardar los pocos pesos que se llegaron a atesorar.
En todo ese contexto, los rendimientos ofrecidos por los plazos fijos siguen pareciendo escasos y poco seductores para muchos ahorristas.
Según calculó Iprofesional.com, con la nueva tasa de interés, si ahora se realiza un depósito a plazo fijo durante un mes se “ganará” 3,83% en ese período, un nivel bastante inferior a las cifras de inflación registradas en el mismo lapso (6,7% en marzo).
Además, el nuevo porcentaje anual representa un rendimiento de 57,1% de Tasa Efectiva Anual (TEA). Es decir que, si se renueva todos los meses la colocación más sus intereses, durante todo un año, la renta mensual sería del 4,76%. Una cifra que, en el mediano plazo, puede ser útil, pero que no se puede evaluar para un lapso corto o inferior al año.
Cuánto se ganaría con $100.000 colocados en un plazo fijo a 30 días
Si el ahorrista concreta una colocación de $100.000 obtendrá dentro de 30 días un capital total de $103.833. Lo que equivale a una renta de $3.833 (3,8%) en ese período.
Entonces, las subas de tasas que empezaron a regir el lunes 18 de abril, le representan a un depositante minorista una renta mensual adicional de apenas $205,48 por cada $100.000 depositados, respecto al monto que percibía antes del incremento de este mes.
Por último, aquellos ahorristas que hacen sus cálculos para permanecer durante un año en este instrumento de ahorro, las cifras que se prometen en ese tiempo no lucen atractivas, sobre todo porque no hay indicios de que la inflación vaya a ceder en los próximos meses.
