Luego de que miles de seguidores del exmandatario de Brasil Jair Bolsonaro invadieran hoy el Palacio del Planalto, el Congreso Nacional y el Supremo Tribunal Federal (STF, la Corte Suprema brasileña), en Brasilia, algunos referentes políticos de la región comenzaron a expedirse sobre los incidentes. Desde Argentina, Alberto Fernández escribió en su cuenta de Twitter: “Quienes intentan desoír la voluntad de las mayorías, atentan contra la democracia y merecen no solo la sanción legal que corresponda, sino también el rechazo absoluto de la comunidad internacional”.
En un extenso hilo de su cuenta en esa red social, el mandatario argentino prosiguió: “Como presidente de la Celac [Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños] y del Mercosur pongo en alerta a los países miembros para que nos unamos en esta inaceptable reacción antidemocrática que intenta imponerse en Brasil”. Fernández le dio su completo apoyo al pueblo brasileño “para defender la democracia” y habló de “nunca más permitir el regreso de los fantasmas golpistas que la derecha promueve”.
Avanzada la tarde, la vicepresidenta Cristina Kirchner también dio su parecer en contra de los disturbios. “Las imágenes de hoy en Brasilia replican con exactitud las imágenes del 6 de enero de 2021 en el Capitolio de Washington. No es casual…”, escribió la funcionaria nacional. “Confiamos en la experiencia de Lula para afrontar este verdadero desafío a la democracia del Brasil”, reflexionó.
El canciller Santiago Cafiero también hizo público su repudio al accionar de los manifestantes: “Frente a las acciones golpistas de la derecha en Brasil, manifestamos nuestra solidaridad con Lula y alzamos la voz en defensa de la democracia brasileña”.
Horacio Rodríguez Larreta se hizo eco de lo que sucede en el país vecino. “Profunda preocupación por el asalto a las instituciones de la democracia en Brasil. Mi condena absoluta a la acción violenta y mi total solidaridad y apoyo a Lula y a todo el pueblo de Brasil”, escribió el jefe de Gobierno porteño.
Uno de los primeros en manifestarse fue el presidente de Colombia, Gustavo Petro. “Toda mi solidaridad al pueblo del Brasil. El fascismo decide dar un golpe”, dijo el mandatario y llamó a los integrantes de la Organización de Estados Americanos (OEA) a unirse de manera “urgente” y solicitó que sea aplicada la Carta Democrática de ese organismo.
”Es hora urgente de reunión de la OEA si quiere seguir viva como institución y aplicar la carta democrática”, ha publicado Petro en su cuenta en Twitter. Petro aprovechó para recordar que su Gobierno defendió fortalecer el sistema interamericano de Derechos Humanos aplicando las normas vigentes y ampliando la carta a los derechos de la mujer, ambientales y colectivos “pero la respuesta son golpes parlamentarios o golpes violentos de la extrema derecha”.
“Impresentable ataque a los tres poderes del Estado Brasilero por parte de bolsonaristas”, dijo otro de los jefes de Estado que dio su parecer, el presidente chileno Gabriel Boric. El funcionario dijo que el Gobierno de Brasil cuenta con el respaldo frente a lo que calificó como un “cobarde y vil ataque a la democracia”.
Evo Morales fue contundente: “El golpismo no pasará. La democracia prevalecerá”. El exmandatario boliviano hizo un llamado a toda la comunidad internacional, los organismos multilaterales y gobiernos democráticos para que “formen un solo bloque de defensa de la democracia en Brasil”.
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, condenó “enérgicamente” los actos “violentos y antidemocráticos” en Brasil, ya que entiende que tienen como objetivo “generar caos” e incumplir “la voluntad popular” expresada en las elecciones de 2022 de las que salió derrotado Bolsonaro. Por su parte, el jefe de Estado de Ecuador, el conservador Guillermo Lasso, se sumó a las críticas contra “las acciones de irrespeto y vandalismo” perpetradas contra “instituciones democráticas”, ya que “atentan contra el orden democrático y la seguridad ciudadana”.
“Rechazamos de manera categórica la violencia generada por los grupos neofascistas de Bolsonaro que han asaltado las instituciones democráticas del Brasil. Nuestro respaldo a Lula y al pueblo brasileño que seguramente se movilizará en defensa de la Paz y de su presidente”, escribió el mandatario venezolano Nicolás Maduro.
Andrés López Obrador, el presidente de México, habló de un “intento golpista de los conservadores de Brasil azuzados por la cúpula del poder oligárquico, sus voceros y fanáticos”.
“Hacemos un llamamiento al inmediato retorno a la normalidad democrática”
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno español, dijo que “condenamos rotundamente el asalto al Congreso de Brasil y hacemos un llamamiento al inmediato retorno a la normalidad democrática”. El mandatario brindó su total apoyo a Da Silva y se refirió a la democracia.
Asimismo, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social de España, Yolanda Díaz, mostró su preocupación después de que cientos de simpatizantes bolsonaristas hayan superado las barreras policiales e invadido la sede del Congreso brasileño, palacio presidencial, el Palacio de Planalto, y la sede del Tribunal Supremo Federal en Brasilia este domingo.
El presidente francés, Emmanuel Macron, pidió “respetar las instituciones” de Brasil y expresó el “apoyo indefectible de Francia” al presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva. En tanto que Estados Unidos indicó, a través del asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, que “condena cualquier intento por socavar la democracia” en Brasil.
”El presidente estadounidense Joe Biden sigue de cerca la situación y nuestro apoyo a las instituciones democráticas de Brasil es inquebrantable. La democracia de Brasil no se verá sacudida por la violencia”, señaló en Twitter. Un portavoz de Seguridad Nacional dijo a la AFP que Biden “ha sido informado y seguirá siendo informado sobre esto”.
El diputado argentino Nicolás del Caño escribió en sus redes sociales: “Nuestro enérgico repudio al acto golpista de los bolsonaristas que han tomado el Congreso de Brasil”.
La presidenta de la Cámara de Diputados de la Nación, Cecilia Moreau, repudió también la toma del Congreso de Brasil por parte de activistas afines a Bolsonaro y expresó su solidaridad para con el presidente Lula Da Silva.”Como presidenta de Diputados repudio de manera enfática la toma del Congreso Nacional de Brasil y le expreso toda mi solidaridad al presidente Lula”, dijo la legisladora en su cuenta de Twitter y sumó que “estas acciones demuestran que la democracia se enfrenta al odio y que debemos combatir la intolerancia con más diálogo”.
En tanto, el diputado nacional radical Mario Negri expresó su “absoluto repudio” a los intentos golpistas de los seguidores de Bolsonaro en Brasil y deseó que “prevalezca el orden y la democracia” en el vecino país. El presidente del bloque de diputados de la UCR y del interbloque parlamentario de Juntos por el Cambio (JxC) dijo en su cuenta de Twitter: ”¡Espero que prevalezca el orden y la democracia en todo Brasil!”, enfatizó.
Desde España, el portavoz del partido político Podemos, vinculado a la izquierda, Pablo Fernández, declaró en su cuenta de Twitter respecto de los seguidores de Bolsonaro: “Son enemigos de la democracia”.
