En el marco de la adhesión de Tucumán al régimen de blanqueo de capitales, establecido por la Ley Nacional 27.743, el legislador Carlos Gallia, titular de la Comisión de Hacienda y Presupuesto, brindó detalles sobre esta medida y sus implicancias para la provincia.
En Buen Día, informativo de LG Play, Gallia destacó que esta ley, discutida ampliamente en medios nacionales, representa una de las oportunidades de blanqueo más accesibles de los últimos 15 a 20 años. “Es una ley que tiene muchas facilidades y oportunidades. Hoy, una persona puede depositar en una cuenta especial $1.000 y, a partir del 1 de octubre, ese dinero entra directamente en el sistema económico legal”, dijo el legislador.
El objetivo principal, según Gallia, es atraer capitales que actualmente están fuera del sistema financiero argentino, utilizando los acuerdos bilaterales y las listas negras y grises de paraísos fiscales como filtros para garantizar la transparencia. “No es que uno pueda poner dinero libremente en una cuenta extranjera sin control. Hay acuerdos internacionales que regulan estos movimientos”, aclaró.
La ley permite el blanqueo de dinero en efectivo hasta el 30 de septiembre de 2024 sin pagar impuestos hasta un límite de $100.000. Para montos superiores, se ofrecen diversas alternativas de inversión, como bonos soberanos o proyectos inmobiliarios en construcción.
En cuanto a las implicancias para Tucumán, Gallia dijo que la provincia se adhiere al régimen nacional, pero con la particularidad de que no se cobrará el impuesto a los Ingresos Brutos sobre los montos blanqueados. “Esto hace que el blanqueo sea menos oneroso en Tucumán. Al no cobrar Ingresos Brutos, facilitamos que más personas se adhieran al régimen”, indicó.
Una modificación destacada en la ley provincial es que aquellos contribuyentes que estén siendo objeto de una inspección fiscal no podrán blanquear los fondos vinculados a las operaciones fiscalizadas, aunque sí podrán hacerlo con otros bienes no implicados en dichas inspecciones.
Finalmente, Gallia reconoció que este tipo de medidas siempre genera debate. “Algunos pueden verlo como un premio al evasor, pero es una herramienta necesaria en el contexto económico actual. Lo importante es que se controle estrictamente que no ingrese dinero ilícito”, concluyó.