Tucumán está navegando por aguas turbulentas en lo que respecta a la seguridad en sus escuelas. Los ecos inquietantes de amenazas de bomba han sacudido varios establecimientos educativos en la provincia, desatando un llamado urgente a la acción. La Policía ha tomado la batuta, implementando protocolos preventivos a solicitud expresa del Ministerio de Seguridad, Agüero Gamboa.
Antelo Arreyes, subjefe interino del Primer Distrito Urbano, compartió detalles sobre la estrategia en marcha: “Estamos en plena faena en las escuelas, aplicando dos protocolos a medida. Uno para lidiar con amenazas de tiroteo y otro para enfrentar la posibilidad de explosivos. Nos estamos moviendo al compás de estos protocolos, en función del tipo de amenaza que se haya planteado. Tomamos decisiones rápidas: evacuar o no evacuar los centros educativos y, en paralelo, involucrar a profesionales para esclarecer la situación”.
Para cada tipo de amenaza, se despliegan procedimientos específicos. Ante una intimidación con explosivos, se desmenuza el aviso recibido, el destinatario y la situación en su totalidad. En este punto, el Cuerpo de Bomberos de la Policía de Tucumán entra en acción, coordinando la respuesta necesaria.
En el caso de una amenaza de tiroteo, se desencadena un proceso similar de evaluación. Se le da paso al Sistema Integral de Emergencias 911, donde preguntas clave a los agentes presentes determinan la trayectoria a seguir y la necesidad de intervención profesional para abordar el incidente.
En una hipotética situación donde se encuentre un arma de fuego en el lugar de la amenaza de tiroteo, la escena es preservada y se notifica a las autoridades judiciales competentes. Por supuesto, la seguridad de los estudiantes es prioritaria, y ante este escenario, serían evacuados sin demora.
La incertidumbre reina en estas circunstancias, pero Tucumán busca reafirmar su compromiso con la seguridad escolar. Con protocolos en marcha y un equipo dispuesto a actuar, la provincia busca brindar a sus estudiantes un entorno de aprendizaje seguro y tranquilo, donde puedan crecer y prosperar sin temores ni amenazas que enturbien su futuro.