Un albañil argentino fue atropellado por un policía en Bolivia, sufrió una fractura expuesta de tibia y peroné y continúa internado porque le reclaman un millón y medio de pesos para poder operarlo. Su madre viajó para ayudarlo y sufrió un principio de ACV por lo que debió ser asistida también.
La dramática situación se remonta a la noche del 13 de abril, cuando Ángel Vicente Choque iba manejando su moto por las calles de la ciudad de Cobija, ubicada en el norte de Bolivia. Su andar era normal hasta que recibió un impacto de atrás y resultó gravemente herido.
Los vecinos de la zona asistieron rápidamente al albañil de 30 años, identificaron que el hombre que había provocado el accidente era policía y lo obligaron a que se quede en el lugar. Unos minutos después llegó la Policía al lugar y el hombre se negó a que le hicieran el test de alcoholemia.
“No se dejó realizar el test, pero tenía aliento a alcohol”, dijo una hermana de Choque en diálogo con Cadena 3. La mujer además detalló que su hermano sí se realizó la prueba que arrojó “cero” de alcohol en sangre.
Desde aquella noche que el oriundo de San Salvador de Jujuy se mantiene internado en el Hospital Roberto Galindo Terán de Cobija, donde le diagnosticaron fractura expuesta grado 3 de tibia y peroné izquierdo. El mismo médico que lo diagnosticó, le realizó las curaciones el pasado 26 de abril y le colocó unos fijadores externos en su pierna.
La hermana de la víctima contó que la persona que provocó el choque “no se quiso hacer cargo” de los gastos en el hospital y se quejó por los costos de la atención: “Se cobra hasta la gasa que tenés porque si no, no te van a curar tampoco”.
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La joven explicó que necesitan conseguir alrededor de 10.000 bolivianos que equivalen alrededor de $1.500.000. “No contamos con esa cantidad”, reconoció su hermana, sobre la dramática situación.
A la desesperación que genera el estado de salud de Ángel, se le sumó otra tragedia que involucra a la madre del albañil. La mujer viajó a Bolivia para acompañar a su hijo y sufrió un principio de ACV que obligó a que sea atendida.
“Tiene un marcapasos y más de 57 años. A través de todas esas preocupaciones, a mi mamá le provocaron una parálisis facial. Anoche le tuvieron que realizar una tomografía y nos cobraron 2 mil bolivianos. Tiene un coágulo en el cerebro”, contó la mujer en diálogo con canal 2.
Por lo que explicaron desde el entorno familiar de Choque, deben enviar una suma cercana a $400.000 por semana. “No somos una familia pudiente ni que tiene dinero. Hoy apelamos a la solidaridad de todo el mundo porque no podemos. Es imposible para nosotros conseguir esa cantidad de dinero”, explicaron.
Mientras tanto, el joven de 30 años continúa en la lista de espera para “poder entrar a la cirugía para que se le coloque la placa y se le saquen los soportes que tiene en el pie izquierdo”.
La familia de la víctima propuso la idea de trasladar a Ángel a la Argentina para que pueda ser atendido en su país, pero desde el Gobierno respondieron que el avión sanitario está en Estados Unidos siendo reparado.
