Para un joven fue una pesadilla que duró casi dos años. Pero al escuchar el fallo, abrazó a sus abogados y volvió a sonreír. El estudiante universitario tuvo que esperar 20 meses para que un juez condenara al hombre que había abusado de él y que, después del ataque, le robó sus pertenencias y luego lo amenazó con “escracharlo” por su condición sexual.
El fallo, que tiene sólo un antecedente en la historia judicial de la provincia, fue muy bien recibido por la comunidad LGBT de la provincia que cree que con esto se multiplicará este tipo de denuncias. El estudiante universitario, a través de una aplicación online, acordó encontrarse con alguien (que utilizaba una identidad falsa).
El encuentro tuvo lugar en la plaza San Martín de la capital. Al día siguiente, la víctima aceptó la invitación a dar un paseo en moto que le hizo el sujeto, que se había ganado su confianza. En cuanto al ataque en sí mismo, el 27 de junio de 2021, los jóvenes se dirigieron hacia Yerba Buena. De allí ingresaron por el sendero de la Ciudad Universitaria.
En ese marco, cabe mencionar que el supuesto nuevo amigo invitó al damnificado a caminar por el lugar. Ya en medio de la vegetación, el sujeto comenzó a agredir al estudiante y a decirle que estaba armado, que era un violador serial y un asesino. Después de quitarle el celular Iphone, abusó de él.
En la declaración que realizó ante las autoridades, P.G. contó que el acusado lo obligó a ponerse la ropa y a subir a la motocicleta bajo las amenazas de revelar su condición sexual en las redes sociales y dañar a todos los miembros de su familia, puesto que sabía dónde vivían y a qué se dedicaban. Lo trasladó hasta Ejército del Norte y avenida Belgrano.
Antes de huir volvió a amenazarlo, señalando que él pertenecía a una mafia que atacaba a jóvenes como él. P. G. realizó la denuncia en la Policía. Pero fue su hermano el que logró dar un paso clave: consiguió rastrear dónde estaba el celular que había sido robado. No sólo lograron recuperar el Iphone, sino que descubrieron la identidad del sospechoso.