“Era tarde ya, como las nueve de la noche. Yo pasé por ahí, por la Godoy Cruz entre la Perú y Santillán, y los vi: el chiquito y el amigo estaban en la calle, jugando, andando en la bici. Cuando volví a pasar por la zona, media hora después, ya vi la bici tirada y la moto de la Policía”. El testimonio de un vecino del Barrio Oeste II es el que comenzó a sumar detalles de lo vivido la noche del martes:
“Cuando veo a la Policía, les pregunto qué había pasado. Y ahí me dicen que uno de los chiquitos andaba en la bici por la calle, le apareció el auto y lo chocó sin darse cuenta. Cuando les pregunté a los policías que más sabían me dijeron que se lo habían llevado al chiquito al Hospital de Niños, que estaba grave”.
En la esquina de Godoy Cruz y Perú, los vecinos comenzaron a juntarse y a preguntarse qué es lo que había pasado. “En esa esquina hay un kiosco y vimos las cámaras, vimos cómo fue el accidente. El chiquito con el amigo doblaron por la Zenón Santillán, pero no sé por qué han querido volver por la Perú y ahí les apareció el auto que lo ha chocado a uno. La verdad es que el auto venía fuerte, pero los chiquitos se le metieron en el camino sin querer, sin darse cuenta”.
La escena, de acuerdo a los testigos del hecho, fue desgarradora: “Fue tan fuerte el golpe que el chiquito terminó arriba del capó y todo el parabrisas se reventó. El auto se detuvo a 45 metros del hecho. Fue muy fuerte el golpe”. Inmediatamente a la publicación, los vecinos del barrio coincidieron: “Yo vi el accidente: fue terrible”.
Y entre todos empezaron a preguntarse quién era el niño: “Es el nieto de doña Nélida, es el hermanito de Samir. Estaba muy golpeado la columna y cadera”. Cabe mencionar que en la Comisaría 12, cuyo personal intervino inmediatamente sucedido el hecho, aprovecharon para brindar información al respecto.
“Nos comunicamos hace unos minutos con el Hospital de Niños. Nos confirmaron que el niño, de entre 9 y 10 años, se encuentra en grave estado”, señalaron. Comunicados de la última noticia sobre la salud del pequeño llamado Alejandro, los vecinos del barrio convocaron a una cadena de oraciones para la pronta recuperación: “Vamos a orar por él. Dios quiera que se ponga bien”.
