El comandante en jefe de la Fuerza Aérea de Chile, Arturo Merino, confirmó este jueves la existencia de un audio de WhatsApp que advertía sobre una falla eléctrica en el Hércules C-130 desaparecido a principios de esta semana. La noticia se dio a conocer poco después del hallazgo de piezas flotantes pertenecientes a la aeronave siniestrada, y de que el Gobierno de ese país afirmara que es “prácticamente imposible” que alguno de los 38 pasajeros que viajaban a bordo haya sobrevivido.
En diálogo con la prensa local, el alto mando sostuvo que poco antes de que se perdiera contacto con el Hércules C-130, un soldado le envió un mensaje de voz a su madre en el que se refirió a un desperfecto eléctrico en el avión. No obstante, el pasajero también expresó que la aeronave continuaba su vuelo en función del itinerario trazado.
“El audio existe, no lo he escuchado en particular y se lo vamos a pasar al general que está a cargo de la investigación administrativa y también al fiscal”, sostuvo.
En tanto, el diario La Cuarta dio detalles adicionales sobre el contenido del mensaje. Al respecto, informaron que el soldado le manifestó a su madre sentirse emocionado por el viaje que estaba realizando a la Antártida. Sin embargo, también le contó acerca de una “falla eléctrica que lo mantenía inquieto”.
A raíz de esta nueva información, no tardaron en trascender rumores que afirmaban que el avión habría despegado sin estar en condiciones de hacerlo. No obstante, Merino aseguró: “Lo único que quiero mencionarles es que los dos pilotos eran profesionales, y ellos tenían toda la autoridad para dejar la aeronave en tierra si es que hubiese habido una falla”.
Por último, el militar disipó dudas sobre la reciente alerta que había emitido la Fuerza Aérea de Estados Unidos por una falla técnica en los C-130 Hércules.
“Debido a un accidente que tuvo uno de estos aviones -al que se le desprendió un ala-, la Fuerza Aérea de Estados Unidos, que es la responsable del mantenimiento global de los C-130 en todo el mundo, hizo una revisión de su flota y determinó que habían ciertas fisuras, por lo que estableció una serie de órdenes técnicas”, contó.
Sin embargo, explicó que, por ese motivo, en agosto de este año la Fuerza Aérea chilena recibió la orden de que todas las unidades de este modelo dejaran de volar hasta que se hicieran las revisiones. “Esta orden nos llegó este año y se decretó de inmediato que la flota se quedaba en tierra hasta que se le hiciera la inspección”, finalizó.