Como una manera diferente de medir el pulso de la grieta, dos consultoras preguntaron a los votantes de Juntos por el Cambio cómo veían a los principales dirigentes del Frente de Todos. Una parte del resultado mostró lo previsible: los rechazan fuerte. Más sorpresivo e insólito, sin embargo, fue el múltiple empate en el último puesto entre Alberto Fernández, Axel Kicillof, Sergio Massa, Daniel Scioli, Victoria Tolosa Paz y los Kirchner. La paridad es incómoda: los siete tienen apenas un 1% de valoración a favor entre los electores de la oposición.
Los datos son de D’Alessio IROL y Berensztein, dos firmas que trabajan en conjunto hace años y mensualmente publican un ranking de imagen de referentes oficialistas y opositores. Días atrás publicaron el informe nacional de diciembre, con 1.047 casos. En los resultados, además de poner el número general, detallan la mirada de los encuestados según la afinidad política.
El martes, se adelantó la otra cara de la polarización: cómo venían los votantes del frente de todos a los referentes de Juntos por el Cambio. Ganó el neurocientífico radical Facundo Manes, con 21% de imagen positiva. Lo siguieron Horacio Rodríguez Larreta y Rogelio Frigerio, con 14%. Parece poco, pero es mucho más de lo que lograron los dirigentes oficialistas.
Esta diferencia confirma una tendencia sobre la que los analistas vienen advirtiendo hace años: es más fuerte el anti-kirchnerismo que el anti-macrismo. En la misma tabla que publicó este diario, por caso, la peor vista entre los electores del FdT fue Elisa Carrió, con 3%. La siguió Mauricio Macri, con 5%. Un rechazo altísimo, pero no tanto como contra los K.
Sergio Berni, al tope
En total, fueron 15 los dirigentes evaluados del Frente de Todos. Casi la mitad, como se explicó, apenas llegó al 1% de imagen positiva entre votantes de JxC. Otro tres terminaron apenísimas mejor: el canciller Santiago Cafiero sumó 2%, y Eduardo “Wado” de Pedro (ministro de Interior nacional) y Martín Insaurralde (jefe de Gabinete bonaerense) alcanzaron 3%.
Un escalón más arriba viene el ministro de Economía, Martín Guzmán (7%), con quien suele darse una particularidad. Pese a que en todas las encuestas la gente reclama por la economía -en particular por la inflación-, Guzmán suele quedar entre los funcionarios más valorados del Gobierno nacional.
Por encima del economista quedó Leandro Santoro: el diputado nacional sumó 9% de apoyo entre votantes opositores. Y en dos dígitos, quedan sólo tres oficialistas: el gobernador de San Juan, Sergio Uñac, y el ministro de Agroindustria, Julián Domínguez, ambos con 10%. Y el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, con 11%.
Lo de Berni también amerita un análisis. A partir de las peleas que encaró contra un sector del Gobierno nacional (contra la ex ministra Sabrina Fréderic y contra el propio Alberto Fernández), Berni ganó algo de simpatía entre electores de Juntos por el Cambio. No mucho, pero suficiente para ser el kirchnerista más querido.
Por esta particularidad, el ministro de Seguridad bonaerense también suele quedar bien ubicado en un sondeo de la Universidad de San Andrés, donde lo mezclan con 15 funcionarios del Gobierno nacional.
