Durante el transcurso de la noche de la pasada jornada del día martes, un grupo de efectivos policiales que desempeñan su labor en la policía local procedió a la oportuna aprehensión a una joven de unos 18 años de edad que vendía un celular en la zona de avenida Mate de Luna y pasaje Centenario.
El problema es que a quienes les vendía el aparato en cuestión eran nada más ni nada menos que las mismas personas a las que les había robado unos meses atrás. Los efectivos de la División Patrulleros realizaban recorridos por la zona cuando un padre y su hijo se acercaron a explicarle la situación.
En ese marco, es menester dar cuenta acerca de que, una vez que llegaron a la avenida Mate de Luna y pasaje Centenario, los efectivos dialogaron con la acusada y luego de que el joven reconociera frente al personal policial que el teléfono era suyo, trasladaron a la chica de 18 años a la Comisaría Tercera.
Al respecto, cabe mencionar que en lo que hace a la dependencia policial, tanto padre como hijo realizaron la correspondiente denuncia y comprobaron a través de la documentación correspondiente que el IPhone pertenecía a la víctima. Finalmente, la acusada de 18 años quedó a disposición de la Justicia.
