El encuentro comenzó con un sorpresivo golpe del conjunto guatemalteco a los cuatro minutos: un tiro libre desde la izquierda se cerró de tal manera que Emiliano Martínez debió intervenir y, en el rebote, la pelota se desvió en Nahuel Molina y Lisandro López no pudo evitar que ingrese en su propio arco en el despeje.
Sin embargo, el 0-1 iba a durar muy poco, porque una buena presión alta de la Albiceleste hizo que el arquero Nicholas Hagen termine cometiendo un error fatal en salida, en el que le entregó la pelota a Lionel Messi, y el 10 no perdonó.
Instantes después del 1-1, Dibu Martínez salió del área a cortar una acción con los pies y el rechazo terminó en poder de Óscar Castellanos, que intentó un remate bombeado de larga distancia que se perdió muy cerca del travesaño.
Argentina comenzó a dominar el ritmo del partido y a jugar permanentemente en campo rival. Guatemala intentó cortar los circuitos de juego en la mitad de la cancha, pero las sociedades comenzaron a aparecer y el juego del equipo de Scaloni fue creciendo con el correr de los minutos. Tal es así que a los 38, Carboni logró llegar hasta el fondo adentro del área y Nicolas Samayoa llegó tarde al cruce: penal y gol convertido por Lautaro Martínez con una impecable definición contra el palo derecho para poner el 2-1.
Con el resultado a favor, el dominio argentino comenzó a ser notable. Leo Messi tuvo la chance de estirar la ventaja, pero el arquero Hagen salió rápido para taparle la definición.
Sobre el final de la primera parte, Messi estrelló un tiro libre contra el palo derecho y, en la misma acción, Lautaro Martínez inventó una chilena adentro del área que fue salvada entre el arquero y el palo. En el final de la jugada, Lisandro Martínez la empujaba en la línea tras el último rebote, pero el tanto fue invalidado por posición adelantada.
El inicio del complemento fue una continuidad del cierre del primer tiempo. Argentina siguió manejando los hilos del encuentro y logró estirar la ventaja luego de una exquisita triangulación: pared entre Messi y Enzo Fernández, definición de Lautaro. Todo a un toque, para poner el 3-1.
Pero el arquero guatemalteco no iba a poder con la sociedad Di María – Messi. Ángel conectó un pase profundo que dejó mano a mano al 10 y éste definió con un simple toque que se coló contra el palo derecho.
Las variantes le dieron aún más aire a la Albiceleste que quiso ir por más. Hagen se lució con una doble tapada, primero a Julián Álvarez y después a Di María, tras una gran chilena del rosarino.
Fue victoria albiceleste 4-1 en el último desafío previo a la Copa América. Ahora, la Albiceleste sueña con volver a levantar el título. ¡Vamos Argentina!