El oportunista y representante del “Vamos por todo” versión tucumana, Germán Alfaro, sueña con tener una especie de lanzamiento simbólico este 9 de Julio. Y es que, luego del acto en Casa Histórica, el presidente Alberto Fernández y el gobernador Juan Manzur recorrerían las obras de refacción de la Plaza Independencia, corazón neurálgico de la capital tucumana nada menos que en el Día de la Independencia.
La intención del intendente de la Ciudad es mostrarse al país este 9 de Julio como un ‘dialogista’ que encabeza obras junto al Jefe de Estado y el mandatario provincial, días después de su encuentro con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. De hecho, la intención de Germán Alfaro es mostrarse como el “Larreta tucumano” y quedar bien parado ante el Presidente y el gobernador.
En esa línea, puertas para adentro de la coalición de Juntos por el Cambio, cada vez se afianza más la idea de que el Partido por la Justicia Social (PJS) compita, tal y como se publicó en Tucumán Despierta, en la interna de JxC, probablemente con referentes del PRO que preside Ramiro Beti, de la Democracia Cristiana y radicales como sus aliados, el legislador provincial, Raúl Albarracín y el intendente de Bella Vista, Sebastián Salazar en la nómina.
Pero esto no es todo, ya que para mantener a Germán Alfaro dentro de Juntos por el Cambio, se impondría así la postura del diputado nacional José Cano y la senadora nacional Silvia Elías de Pérez de dejar fuera del armado opositor a Fuerza Republicana, tal como planteaban los intendentes Mariano Campero y Roberto Sánchez. De todos modos, la dupla Cano – Elías de Pérez continúa con la idea de intercambiar bancas en el Congreso de la Nación.
Al mismo tiempo, se espera una definición de los jefes municipales radicales que siempre insistieron con la idea de renovación y ampliación del espectro opositor, pero no lograrían sumar a su socio Bussi y cumplir el sueño de un gran Frente Amplio Opositor. Por lo pronto, días atrás volvieron a mostrarse juntos en Concepción, y podrían apuntar a ser candidatos si no hay un acuerdo macro que contenga a todas las corrientes opositoras.
Incluso, todavía no descartan que a último momento se abra la puerta a Fuerza Republicana, mientras afilan la lapicera para definir si compiten dentro de la interna de Juntos por el Cambio. No hacerlo, afectaría sus chances de encabezar una boleta en 2023. De esta forma, el espacio opositor se dirime por estas horas entre una PASO entre alfaristas y radicales con aspiraciones, en la que quién se imponga quedaría como principal accionista del espacio de cara a 2023.
De esta manera, en el marco de la cuenta regresiva para la presentación de listas, en la oposición las definiciones finales tendrían lugar en un cónclave la mañana del miércoles, mientras que el peronismo espera una confirmación oficial del jaldismo de competir con lista propia y el manzurismo aguarda que Alberto Fernández arribe a Tucumán a bendecir a sus candidatos propios. Las cartas están echadas y la especulación las reparte en la mesa de la política.