El policía local de Avellaneda Luis Chocobar se sentará en el banquillo de los acusados en febrero de 2020. Será a poco más de dos años de protagonizar un episodio que lo dejó en el ojo de la tormenta pública: durante una persecución a pie, el agente de 32 años mató de un tiro a Pablo Kukoc (18), uno de los ladrones que atacó a puñaladas al turista estadounidense Joe Wolek en La Boca para robarle su cámara de fotos y otras pertenencias.
Chocobar comenzará a ser juzgado el 26 de febrero de 2020 por el delito de “homicidio por exceso en el cumplimiento del deber” y está previsto que el debate termine en marzo, luego de cinco audiencias. Se estima que pasarán más de 30 testigos, entre los que se espera que esté el propio Wolek.
El turista y el policía ya se conocieron en un encuentro anterior. Según remarcan en el Gobierno nacional, que defiende el accionar de Chocobar, él le salvó la vida.
Por la misma causa también será juzgado el presunto cómplice del ladrón muerto, que era menor de edad al momento del hecho y que está detenido con prisión preventiva, ya que tenía antecedentes penales.
En un principio Chocobar iba a ser sometido al proceso por el Tribunal Oral en lo Criminal Nº 7 porteño, pero la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional determinó que sea el Tribunal Oral de Menores N° 2, integrado por los jueces Fernando Pisano, Jorge Apolo y Adolfo Calvete, quien lleve adelante el caso en su totalidad, ya que ambos casos tienen las mismas pruebas. Play
La Cámara sostuvo que se buscó evitar un dispendio en la actividad probatoria, especialmente aquella consistente en la producción de testimonios. La fiscal del juicio será Susana Pernas.
Chocobar mantiene su trabajo en una dependencia de la Policía Local en Wilde, partido de Avellaneda, donde cumple tareas administrativas. Según su abogado, está “muy preocupado” por el arranque del juicio y con problemas de salud: desde el año pasado sufre de diabetes.
“No está deprimido pero está preocupado y lo afecta la causa penal, pero está convencido de lo que hizo”, explicó a Infobae Soto. “No hubo intención de matar y quedó claro en el requerimiento del Ministerio Público Fiscal”, remarcó el abogado, quien pedirá la absolución porque “obró en su deber”.
El “caso Chocobar” llegará a juicio un año después de que el juez nacional de Menores Cristian Axel Von Leers, elevara la causa de ambos implicados: Chocobar y el menor acusado de ser el cómplice de Kukoc, quien está acusado del delito de “tentativa de homicidio criminis causa” contra Wolek.
Días atrás, el Policía acusado volvió a reunirse con la ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich, quien respaldó su actitud en el hecho ocurrido el 8 de diciembre de 2017, cuando el fotógrafo estadounidense caminaba por La Boca y poco antes de llegar a la calle Caminito fue atacado por dos asaltantes que le robaron su cámara y lo apuñalaron 11 veces.
“Desde el primer día de gestión adoptamos un lema: cuidar a quienes nos cuidan. Recibí a Luis Chocobar, está enfermo, su caso le afectó la salud. Le ratifiqué nuestro compromiso: estamos a su lado y al lado de todos los policías que cuidan a la gente y actúan según su deber”, escribió Bullrich en su cuenta de Twitter.
El apoyo del Gobierno nacional al agente Chocobar es claro y desde el primer momento. Tanto, que el propio presidente Mauricio Macri lo recibió pocos días después del hecho.
Chocobar terminó involucrado en el robo a Wolek casi de casualidad. Vecino de La Boca, había salido ese día para tomarse el colectivo con destino a la dependencia policial donde trabaja, en Avellaneda. Cuando vio el robo a Wolek, al turista tendido en el suelo y herido y detectó la escapada de Kukoc.
Tres cuadras después Chocobar disparó contra el ladrón mientras este huía, sin darle el grito de alto. Un video al que tuvo acceso exclusivo Infobae muestra el momento exacto del disparo, hecho a unos 10 metros de distancia del ladrón, que cae sobre el asfalto de la calle. Poco después, el joven ladrón murió.
“Lo que corresponde es la absolución porque cumplía con su deber porque obró con legitima defensa, de los terceros, de la víctima y de él mismo porque estaba en una situación de peligro porque no sabía qué arma tenía Kukoc, que era un hombre muy peligroso”, remarcó Soto.
“La agresión a la que era pasible no era inminente, ya que de las imágenes captadas por el domo instalado en la esquina de Irala y Suárez se observa que al momento de recibir los disparos corría por esa última arteria, sin darse vuelta en ningún momento y se encontraba a varios metros de distancia del oficial”, escribió respecto de la actitud de Chocobar y Kukoc el juez titular del Juzgado Nacional de Primera Instancia de Menores N° 7, Enrique Gustavo Velázquez, quien procesó y embargó al policía.