Hay varias decisiones judiciales que mantienen pendiente a Cristina Fernández de Kirchner y también a su familia. La lupa está puesta sobre la Cámara Federal de Casación, que tiene pendiente una decisión clave para el futuro de la vicepresidenta: debe establecer si confirma el sobreseimiento en la causa Hotesur o si va a juicio. Pero la Justicia también tiene pendiente el destino de más de 5 millones de dólares que le embargaron a Florencia Kirchner y todavía no fueron devueltos.
La historia respecto del dinero de la hija de la vicepresidenta arrancó en 2016. El 15 de julio de ese año, el juez federal Julián Ercolini tomó un planteo del Ministerio Público Fiscal para embargar el dinero de la hija del matrimonio Kirchner, que tenía como argumento de fondo que “la matriz conformada por los negocios irregulares no se agotaría en el beneficio otorgado a los empresarios, sino que también se habría caracterizado por una canalización de fondos de procedencia ilícita de parte de esos empresarios a favor de la propia familia presidencial”.
Gerardo Policcita, el fiscal que había solicitado el embargo, señalaba en una decisión de 2016 a la que accedió PERFIL que Florencia “no solo habría participado en el entramado societario, sino que también al menos parte de ese dinero hallado en su esfera de custodia se lo habrían proporcionado en diferentes circunstancias sus progenitores, quienes resultan sospechados en autos”.
En suma, consideraba que esas sumas de dinero “podrían constituir el producido del ilícito investigado en autos”.
A Ercolini le alcanzaron 7 carillas de una resolución para decretar el embargo del dinero encontrado en las cajas que la hija del matrimonio presidencial tenía en el Banco Galicia.
Cuánto dinero le embargaron
En concreto, son U$D 4.664.000 que estaban en la caja 5783-9-9 de la casa matriz ubicada en Juan Domingo Perón 407. Pero la medida también alcanzó a otro importante monto en dólares: se trata de U$D 1.032.144,91 de la caja de una caja de ahorro y $53.280.
La defensa a cargo del abogado Carlos Beraldi apeló la medida al sostener que no se encontraban verificados los requisitos establecidos en el Código Penal para avanzar con la medida.
El abogado calificó como ridícula la suposición de que la expresidenta haya intentado ocultar dinero a nombre de su hija dentro de una caja de seguridad en el mismo banco donde se adquirieron los dólares y señaló que la hipótesis fiscal sobre la intención de ocultamiento de las operaciones bancarias resultaba incorrecta.
El embargo, que había sido ordenado al considerar que había peligro en la demora, era sobre fondos que, según la defensa, provenían de la herencia del expresidente Néstor Kirchner, en proceso ante el Juzgado de Primera Instancia en lo Civil, Comercial, Laboral y de Minería N°1. En ese carácter, Florencia Kirchner “era titular de bienes inmuebles y acciones de sociedades” y que la información que surgía de la causa por la sucesión desmentía “de manera categórica” la urgencia invocada al momento del embargo, según se desprende de una resolución judicial.
“Hasta un niño se daría cuenta de que si se pretende ocultar dinero no se lo va a dejar dentro de una caja de seguridad en el mismo banco en el cual se compraron los dólares (…). Es más, pretender que una expresidenta de la Nación, con un 100% de conocimiento público, va a ocultar dinero a nombre de su hija, de apellido Kirchner -no Fernández- en un banco privado cuyos principales accionistas tienen una conocida vinculación con el actual gobierno resulta cuanto menos una falta de respeto a la inteligencia“, había expresado Beraldi.
El recorrido judicial
Pero unos meses después, en noviembre de ese mismo año, la Cámara Federal confirmó los embargos sobre la caja de seguridad y las cuentas bancarias. Fue con votos de los jueces Jorge Luis Ballestero, Eduardo Farah y Eduardo Freiler, quienes rechazaron el planteo de nulidad que había interpuesto la defensa.
Así las cosas, Florencia llevó su queja a la Corte Suprema de Justicia, que el 13 de octubre de 2017 confirmó el embargo, con votos de Elena Highton de Nolasco, Juan Carlos Maqueda, Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz. Para sustentar su decisión, los supremos sostuvieron que el recurso no estaba dirigido contra una sentencia definitiva.
En julio se van a cumplir 7 años del embargo dictado por Ercolini y el dinero todavía no fue recuperado por Florencia. Ello a pesar de que los sobreseimientos que dictó la Justicia en favor de la vicepresidenta y su familia, y que ahora tiene que revisar la Cámara Federal de Casación. PERFIL consultó a la defensa de la vice respecto de qué ocurrirá con los fondos, pero no hubo una respuesta al cierre de esta nota.
Una probabilidad es que el fallo que saque Casación determine qué ocurrirá con ese dinero que está en poder de la Justicia. Si la decisión es favorable a la familia Kirchner se configuraría un escenario conducente a su devolución, aunque, si hay apelaciones, la decisión la tendría la Corte en plazos todavía más amplios.