El pasado 2 de septiembre, un trágico incidente sacudió al Barrio 130 Viviendas, donde un niño de tan solo 10 años perdió la vida tras ser alcanzado por disparos de arma de fuego. La investigación sobre este crimen ha avanzado con rapidez, y las autoridades han logrado detener a Matías Gabriel Barrionuevo, de 19 años, como el principal sospechoso del asesinato.
La causa es llevada adelante por la Unidad Fiscal Especializada en Homicidios I, bajo la dirección del fiscal Pedro León Gallo, quien presentó las pruebas y formalizó la investigación. Durante la audiencia de control de la aprehensión, se detallaron los elementos de prueba que vinculan a Barrionuevo con el crimen, entre ellos, el informe preliminar de la autopsia que reveló que el menor falleció a consecuencia de un disparo a corta distancia.
“El imputado ejecutó a sangre fría a un niño de 10 años”, afirmó el fiscal Gallo. Según los testigos, Barrionuevo ingresó a la vivienda de la víctima y salió inmediatamente después de disparar. El informe forense indicó que el niño sufrió un traumatismo encéfalo craneal grave a raíz de dos disparos, lo que ocasionó su muerte poco después en el Hospital de Niños.
El día del crimen, alrededor de las 9:30 horas, la víctima, identificada como GJJ, se encontraba en el interior de una vivienda en el Barrio 130 Viviendas junto a otro niño. En ese momento, Barrionuevo habría ingresado con una pistola calibre 22 y, con intenciones claras de causar la muerte, efectuó los disparos. Esta secuencia de hechos fue corroborada por varios testigos, lo que facilitó la pronta intervención de la Fiscalía.
La acusación presentada por el Ministerio Público Fiscal se centra en el delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, en calidad de autor, contra Matías Gabriel Barrionuevo. Dada la gravedad del hecho y el riesgo de fuga, el fiscal Pedro León Gallo solicitó la prisión preventiva por seis meses. La solicitud fue aceptada por el juez, quien consideró que existían suficientes pruebas que justificaban la medida cautelar.
El fiscal Gallo explicó que el asesinato se cometió con una “crueldad extrema” y que la secuencia de los hechos fue rápida. Los testimonios indican que Barrionuevo no dudó en disparar directamente contra el menor. Según los registros, la víctima fue trasladada de urgencia al Hospital de Niños, donde falleció poco después debido a la gravedad de las lesiones.
El juez interviniente decidió aceptar las pruebas presentadas y dictar la prisión preventiva solicitada. Según la Fiscalía, las próximas etapas de la investigación estarán orientadas a consolidar las pruebas para el juicio y esclarecer todos los detalles que rodean el crimen.
El dolor de una familia
Este viernes se movilizaron a Tribunales Penales y cortaron la avenida Sarmiento los familiares de Juan José González, Juanjo, el niño de 10 años que el pasado lunes fue asesinado de un disparo en la cabeza en el barrio 130 Viviendas. “Mi niño no tenía maldad, ¿por qué le hizo esto?“, exclamó mamá María José, quien encabezó junto al papá Juan Carlos la marcha para exigir ‘Justicia’, junto a familiares, vecinos y amigos.
Franco Carletto estuvo el lunes en el barrio 130 Viviendas y hoy en la puerta de Tribunales, y desde allí nos trajo el doloroso testimonio de María José, una madre que acaba de perder a su hijito de 10 años: “Quiero que se haga Justicia, quiero que pague lo que le hizo a mi hijo. Quiero que el tipo se pudra en la cárcel, quiero que le den cadena perpetua y que se haga Justicia“, sentenció.
“Nos destrozó, no hay motivos“, reprochó Juan Carlos, e insistió: “Los chicos no se tocan, queremos Justicia por mi hijo”, repitiendo las principales consignas escritas en las banderas y pancartas que acompañaron la movilización.
“Pedimos seguridad, estamos con todos los vecinos. Ahí no va a vivir nadie, que pongan una comisaría. Toda esta gente puede decirte cómo era mi hijo”, añadió el papá de Juanjo.
Finalmente, María José manifestó: “Un niño alegre que se levantaba a jugar como un niño de 10 años. Se iba a la mañana a la vuelta, a lo de mi vecino Fernando: él lo ayudaba a repartir gas. Mi niño no tenía maldad, ¿por qué le hizo esto?“.