Culminó ayer una semana bursátil que significó un gran dolor de cabeza para el Gobierno nacional, a pesar de que el mismo fue corto debido al feriado del 17 de agosto. Aun así, debió padecer la masiva movilización en su contra, pero, lo que vino después dejó al Poder Ejecutivo todavía más preocupado que el viernes de la semana anterior, cuando desde este medio alertamos sobre la posibilidad de que endureciera más el cepo cambiario.
Luego, durante el fin de semana el propio presidente, Alberto Fernández, y el ministro de Economía, Martín Guzmán, debieron salir como bomberos a apagar las llamas de la incertidumbre. En pos de ello, negaron cualquier posibilidad de endurecer las restricciones en el acceso a la compra de dólares. Sin embargo, es un Gobierno que carece de credibilidad y su aclaración no hizo más que oscurecer el panorama.
Lo cual, se vio reflejado en la semana que pasó, en la que el volumen de ventas del Banco Central fue el más grande desde que se reinstaló el cepo cambiario y el dólar blue se instaló en los $138, quedando a tan solo $2 del récord que alcanzó el pasado 24 de julio. Todo esto tiene lugar al tiempo que corren rumores acerca de eventuales medidas oficiales a implementar por parte del oficialismo para actuar sobre el mercado formal
En ese marco, la demanda de dólares continuó activa y exigió una vez más la intervención vendedora del BCRA. Esto, le valió al Banco Central en lo que va de agosto, la acumulación de un saldo neto negativo de unos USD 800 millones debido a sus intervenciones en la plaza mayorista. Esta cifra, fue la más elevada desde la reinstauración del cepo cambiario el pasado 28 de octubre, el cual permite adquirir solo USD 200 por mes.
Esto generó, a su vez, que las reservas netas que posee el BCRA cayeran por debajo de los USD 10.000 millones. De todas formas, ni aun así pudo evitar que el dólar blue trepara a los $138 y estirara todavía más la brecha cambiaria con el dólar oficial mayorista a 87,6%, al tiempo que el dólar bursátil contado con liquidación se mantuvo en zona de máximos, es decir, cerca de los $134 pesos. Se trata de cotizaciones que se hallan lejos del valor oficial.
En ese sentido, la semana bursátil cerró ayer con un dólar que se pactó en los $73,58 en el mercado minorista. En lo que va del 2020, el tipo de cambio oficial ascendió un 22,9%. Una cifra nada menor teniendo en cuenta que la inflación mentirosa del Indec se ubica alrededor del 15% en lo que hace a la primera mitad del año. De todos modos, considerando la suba de precios correspondiente a julio y agosto, a lo sumo, emparejaría al dólar con la inflación.
[su_note note_color=”#0A8C06″ text_color=”#ffffff” radius=”10″ class=””]Pero el verdadero problema pasa por la diferencia que le saca la cotización del dólar blue en el mercado paralelo alimentada de las cuevas clandestinas de la city porteña. Esto hace que el Banco Central contemple apenas como un mero observador la sangría de reservas que se produjo en las últimas semanas. Por ello, el fantasma de un cepo cambiario que restrinja todavía más la compra de dólares está más vigente que nunca y no para de asustar.[/su_note]
