Una de las principales actividades que no fue alcanzada con las restricciones dispuestas para contener la escalada de casos de Covid a nivel nacional y provincial fue la Educación. Las autoridades gubernamentales priorizan el dictado de clases en forma presencial, defienden el sistema de burbujas escolares y afirman que las escuelas no son generadoras de contagios.
Pero, el fallecimiento de siete docentes tucumanos encendió la alarma de algunos gremios, entre ellos, SADOP que solicitó que se suspendan las clases presenciales.
Los docentes de educación privada de Tucumán se solidarizaron con los familiares de los docentes fallecidos por coronavirus y a través de su secretario general, Bernardo Beltrán, comunicaron que solicitan a las autoridades retornar a la virtualidad mientras dure la segunda ola de la pandemia y que se garanticen los cumplimientos de los protocolos tanto en los establecimientos educativos como así también en el transporte público de pasajeros.