A 10 días de su primera reunión, la flamante mesa de diálogo del PRO se reunirá nuevamente este lunes con un temario incierto, pero una necesidad evidente: tratar de llegar a acuerdos que eviten la guerra total que se insinúa entre el eje Mauricio Macri-Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta. Hoy, nada parece impedir que la pelea se intensifique: el escenario en la ciudad de Buenos Aires consolidó más el enfrentamiento entre Jorge Macri y Fernán Quirós y en la provincia de Buenos Aires se sigue afianzando hoy la competencia entre Diego Santilli y un candidato bullrichista.
El encuentro tendrá lugar a las 17, en un lugar aún no definido, y será la continuación del que mantuvieron el viernes 28 de abril en la casa de Jorge Triaca, en San Isidro. Irán los mismos que ese día: Macri, Rodríguez Larreta, Bullrich, María Eugenia Vidal, Federico Angelini, Cristian Ritondo, Diego Santilli y Fernando de Andreis. Pero esta vez, aseguran en el PRO, ya no se eludirá el tema más candente: las candidaturas en dos distritos clave como el porteño y el bonaerense.
“La decisión es poner sobre la mesa las cuestiones que tenemos que discutir sí o sí”, anticipó un dirigente que estuvo en contacto con sus pares para preparar la nueva cumbre del lunes. En su primera reunión, los miembros de la llamada “mesa de diálogo permanente” se preocuparon más por dar una señal de unidad con una foto conjunta. Allí no hablaron sobre las candidaturas en la ciudad de Buenos Aires y en la provincia y centraron su charla en la situación económica y la incorporación del liberal José Luis Espert a Juntos por el Cambio, tema que fue aprobado por todos los presentes.
Mauricio Macri y Horacio Rodríguez Larreta, al llegar a la casa de Jorge Triaca, el 28 de abril pasado
Luego del encuentro en la casa de Triaca, el martes pasado por la noche tuvo lugar en San Isidro una reunión reservada en la que 2 representantes designados por Macri, Larreta, Bullrich y Vidal empezaron a preparar el terreno para tratar de llegar a acuerdos electorales. Estuvieron De Andres y Jorge Triaca, en representación de Macri; Santilli y Federico Di Benedetto, por Rodríguez Larreta; Angelini y Juan Pablo Arenaza, por Bullrich, y Alex Campbell y Federico Salvai por Vidal.
No hubo grandes definiciones en ese contacto, aunque se analizaron alternativas para resolver los enfrentamientos en CABA y la provincia que agravaron la tensión en el PRO y que ayudaron a que el libertario Javier Milei creciera más en las encuestas. Del encuentro de esa “submesa” surgió un incipiente clima de acercamiento que permitirá que en la reunión cumbre del lunes se pueda abordar en concreto el tema de las candidaturas. ¿Hay un preacuerdo entre todos? Aseguran que no, aunque sí se sentaron las bases para que las discusiones electorales “vayan al hueso”, sin dilaciones.
El escenario de la pelea del PRO se modificó esta semana con el anuncio de Vidal de que no será candidata presidencial, la decisión de Soledad Acuña de bajarse de la competencia porteña y el impulso de Rodríguez Larreta para apuntalar la candidatura de Fernán Quirós a jefe de Gobierno. La ex gobernadora se reunió luego con Bullrich y Ritondo y este sábado desayunó con Larreta.
María Eugenia Vidal anunció por Twitter que iba a ser candidata presidencial
En todos los casos, Vidal aseguró que se mantendrá neutral en el enfrentamiento Larreta-Bullrich, aunque confirmó que acompañará a Ritondo, su candidato a gobernador, en las recorridas bonaerenses que ahora realizará en apoyo al proyecto presidencial de Bullrich.
Los máximos dirigentes del PRO saben que una disputa a todo o nada los perjudica ante el electorado, que, según confirman las encuestas, valoran la unidad opositora para enfrentar al kirchnerismo. Para colmo, el agravamiento de las fricciones internas hacen crecer a Milei, a quien también el Frente de Todos eligió atacar justamente para que le saque votos a Juntos por el Cambio. En este tablero incierto, en el partido fundado por Macri saben que cada cortocircuito interno hace peligrar su regreso a la Casa Rosada. Por eso se apuró la reunión cumbre del lunes, con más necesidades que certezas.