El pronóstico meteorológico había anunciado una mejoría para este viernes en Villa Carlos Paz y alrededores. Y aunque la lluvia no volvió a caer con la misma intensidad de los últimos días, el cielo continuó cubierto y por momentos, apareció una llovizna molesta. Sin sol, las rutas y los caminos de las sierras cordobesas recibieron a los autos del Rally Argentina, organizado por el Automóvil Club Argentino, con mucho barro y agua. Y terminaron siendo ellos los grandes protagonistas en la primera jornada de montaña de la quinta fecha del Mundial, que tiene a Thierry Neuville como líder provisorio.
El belga (Hyundai) ganó el cuarta y octavo especiales -las dos pasadas por Santa Rosa-San Agustín- y manda con 1h11m13s9 y una ventaja de 11s9 sobre el campeón Sébastien Ogier (Citroën) y de 13s4 sobre Ott Tänak (Toyota), quien llegó puntero al último tramo del día, pero rompió la transmisión, hizo un trompo y perdió segundos que lo retrasaron.
Ese especial que le costó el liderazgo al estonio fue el más accidentado de la jornada. El español Dani Sordo (Hyundai) y Javi-Matti Latvala (Toyota) también hicieron sendos trompos durante el recorrido. Y el finlandés Esapeka Lappi protagonizó un vuelvo que asustó a todos. A cuatro kilómetros del final, su Citröen dio varios vuelcos y terminó muy dañado. La gente ayudó a Lappi y a su copiloto Janne Ferm a salir del auto. Ambos fueron trasladados luego a un hospital, sólo por precaución.
Con ese susto cerró una primera etapa que tuvo tema recurrente. Porque tras cada una de las seis especiales que se corrieron (la primera pasada por Amboy-Yacanto, tercer tramo de la jornada, se canceló porque por el mal estado de las rutas no se pudo montar el operativo de seguridad), las impresiones de los pilotos apuntaron casi siempre a los desafíos que presentaban los caminos.
“En algunos momentos no era el piloto, era pasajero. Algunas partes estaban bien, pero otras llenas de barro. Fue muy difícil”, comentó Kris Meeke tras imponerse en la primera especial Las Bajadas-Villa del Dique.
Gracias a ese triunfo y a un segundo puesto en la primera pasada por Santa Rosa, el británico (Toyota) llegó a la punta, que pudo mantener tras el Super Especial del Parque Temático de Villa Carlos Paz, que se llevó Andreas Mikkelsen (Hyundai). Pero Tänak arrancó con todo la segunda mitad del día y lo bajó.
“Ha sido todo un desafío. Las condiciones y el agarre cambiando constantemente fueron una sorpresa en muchos lugares”, aseguró el estonio, que a pesar de esa dificultad se impuso por la tarde en los 16,65 kilómetros de Las Bajadas-Villa del Dique y luego voló en los 29,85 de Amboy-Yacanto, en los que le sacó 7s8 de ventaja a Neuville. Así recuperó la punta.
Sin embargo, en el último especial, Neuville, líder del campeonato, aprovechó los segundos que regaló Tänak por el problema mecánico en su auto y se trepó al primer lugar.
“Esta etapa fue más difícil de lo previsto porque los caminos no estaban en buenas condiciones, pero me voy contento por este triunfo parcial. La consistencia pagó. Fui mejorando a hice un buen último tramo cuando la ruta era muy dura. Pero solo tenemos una pequeña ventaja, así que nada está terminado aún”, aseguró el belga. ¿Podrá defender este sábado el liderazgo?
Todos al Valle de Punilla
La acción continuará en el Valle de Punilla con seis especiales: dos pasadas -una por la mañana y una por la tarde- por los tramos Tanti-Mataderos (13,92 km); Mataderos-Cuchilla Nevada (22,67) y Cuchilla Nevada-Characatro (33,65). Además, desde las 11.26 se correrá un Super Especial en el Parque Temático de Carlos Paz, con un recorrido de 6,04 kilómetros.