Por un fuerte temporal de viento y nieve, 55 torres de alta tensión cayeron en la localidad de El Escorial. El hecho se registró en la meseta central, al norte de Chubut, y provocó un corte de energía al noroeste de la provincia, aunque no afectó al consumo domiciliario ya que toda la zona está interconectada con el sistema nacional. Las tareas de reparación podrían tomar cerca de un mes.
La linea que colapsó recorre gran parte de la Patagonia. Las torres transportan la energía entre el complejo hidroeléctrico Futaleufú, ubicado en la cordillera, y la ciudad de Puerto Madryn, sobre la costa atlántica, donde abastecen a la empresa Aluar, que utiliza la electricidad como insumo para la producción de aluminio, por lo que no afectan el consumo domiciliario.
La línea es operada por la empresa Transpa S.A., que transporta la generación que se produce en la central hidroeléctrica de Futaleufú, cerca de Trevelin, hasta Puerto Madryn a través de 550 kilómetros sobre torres de 25 metros de altura. Según dio a conocer el medio local Diario Jornada, a raíz de un sobrevuelo organizado por esta compañía se pudo precisar que “fueron 55 las torres de alta tensión colapsadas en la zona de El Escorial”. Y añadieron que 37 de ellas colapsaron en la zona de Sierra Rosada y, otras 18, en Sierra Caracol.
Un temporal inédito
“En un sector de estas dos líneas, en el paraje denominado Sierra Rosada, a unos kilómetros del Escorial, se produjo el 21 a la noche un temporal inédito de nieve, acumulación de hielo y vientos que hicieron que sobre cada una de las líneas se afectaran entre 17 y 18 postes cada una y tenemos un saldo de 37, 38 torres que se han caído”, explicó el director de Transpa S.A, Fernando Guerra a LU17 Radio Golfo Nuevo, de Puerto Madryn.
“Esto tendrá un costo importante, no es una reparación que se realice en tres días, estaremos en el orden de los 20 o 30 días para repararlo”, detalló Guerra. “Ya hemos enviado 10 equipos para evaluar el daño y vamos a montar un campamento con equipamiento”, dijo el gerente de Transpa S.A. y advirtió que deben “cumplir el protocolo Covid-19” para evitar posibles contagios.
Por otra parte, explicó que las torres “son de hierro de acero galvanizado, fueron construidas en 1973 y están diseñadas para condiciones extremas”, pero el temporal fue demasiado fuerte “en esa zona de Sierra Rosada, que está a una altura de más de 1200 metros a nivel del mar, y el 21 hizo 37 grados bajo cero”.
Las torres sostienen el pesado cable que transporta 330 kilovatios, atravesando toda la meseta central chubutense, una región que enfrenta un temporal de nieve y viento con temperaturas de 37 grados bajo cero en la inhóspita meseta.
Voceros de la compañía dijeron que la reposición de estas torres llevará tiempo porque “están ubicadas en una zona de muy difícil acceso con condiciones de rigurosidad climática en esta época del año que hacen muy dificultoso su acceso”.
El sistema colapsó cuando cayeron las torres ubicadas en la zona de “El Escorial”, paraje ubicado casi en la mitad del tendido entre la cordillera y la costa chubutense. A partir de allí se produjo un “efecto dominó” que terminó derribando a otras estructuras que cedieron por el peso, la nieve acumulada y el intenso viento.
El antecedente sobre caída de varias torres del tendido hasta Aluar fue hace tres años, cuando se derribaron tres columnas de las mismas características en “El mirasol”, también en la meseta chubutense. En aquel caso fue por un temporal de lluvia que acumuló agua en la base de la estructura y la hizo ceder.
Imágenes del temporal
Con información de agencia Télam