La Gendarmería detuvo este lunes por la tarde, en Salta, al principal sospechoso de haber asesinado al turista inglés el sábado pasado en Puerto Madero.
Según confirmaron fuentes policiales a TN.com.ar, el detenido es un ciudadano venezolano identificado como Ángel Eduardo “Cachete” Lozano Azuaje, de 21 años. De acuerdo a la investigación, es quien habría matado a tiros a Matthew Gibbard durante el intento de asalto
Luego de que una banda de motochorros quisiera robar y asesinara al turista en la puerta del hotel Faena, en Puerto Madero, la policía siguió una línea de investigación que los llevó hasta la novia de “Cachete”. En la declaración saltó una pista que resultó fundamental: algunos de los delincuentes habrían entrado a la Argentina por Bolivia. Fue ahí que el operativo se desplazó hasta Salta.
A partir de los datos de diferentes empresas de micro de larga distancia, los investigadores dieron con el ómnibus que tomó el presunto asesino para escapar hacia Salta.
La jueza Bernan, a cargo de la causa, le dio la orden a Gendarmería para que interviniera y siguiera al micro hasta el norte argentino. Fue en un punto de la ruta donde pararon el vehículo y detuvieron al sospechoso.
Cómo operaba la banda de motochorros
Este lunes, el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, y la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic, brindaron una conferencia de prensa conjunta sobre el caso del turista inglés asesinado en Puerto Madero. Los funcionarios confirmaron que los delincuentes que mataron a Matthew Gibbard e hirieron a su hijastro formaban parte de una “banda realmente grande” que se dedica a robar a turistas recién llegados al país.
Además del reciente detenido, la policía ya había arrestado a otras cuatro personas que formaban parte de la banda. “Se logró detener a cuatro personas que formaban parte de una banda realmente grande, entre ellos, a aquel que proveía la logística. Ésta consistía en los vehículos utilizados en este tipo de delito, que no es el primero que realizaron en la Ciudad de Buenos Aires”, informó el secretario de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Marcelo D’alessandro, que también participó de la conferencia.
Según dijo, los delincuentes tenían un aceitado modus operandi. “Consistía en detectar a aquel que tenía un reloj de alta gama en Ezeiza, luego lo seguían hasta su destino y ahí realizaban el robo”, explicó.