Empleados del SUTRAPPA volvieron a tomar la repartición, ubicada en la zona de la terminal vieja. Los trabajadores exigen mejoras salariales y denuncian precarización laboral.
Incluso, una de las empleadas decidió encadenarse hasta obtener respuestas por parte del Intendente de San Miguel de Tucumán, Germán Alfaro. Los trabajadores informaron que perciben un salario de $22000.
“A partir del 31 de octubre, no sabemos qué decisión pueden llegar a tomar las nuevas autoridades” señaló Guillermo Cruz Lozano, uno de los 30 trabajadores afectados.
Por el momento y durante todo el día, los empleados informaron que la atención en SUTRAPPA será nula.
“Lo único que le pido al Intendente es que tenga consideración, después de trabajar tantos años no tenemos respuesta alguna” afirmó la mujer encadenada.