“El proyecto recomienda el uso de un lenguaje inclusivo, no discriminatorio, pero no significa para nada el uso de la ‘e’, la ‘x’ y el ‘@’. La intención es no salirse de la norma”, explicó la profesora Elena Pérez en LV12,
“Hace mucho tiempo que nosotros tratamos de tener un lenguaje inclusivo y que no sea discriminatorio. Hay que ser inclusivo al expresarse sin destrozar la lengua, se puede decir el alumnado en vez de los alumnos; los docentes por maestros; es una propuesta del lenguaje en todos los sentidos, con la riqueza que el español tiene”, agregó la decana de la Facultad de Lengua de Córdoba.
“Hay que cambiar el chip, si alguien tiene la idea de que no quiere herir a nadie eso ya es importante, hemos sido muy torpes con el lenguaje me parece que es hora de recuperar esa mirada del otro”, añadió Pérez.
Algunos ejemplos
Entre las recomendaciones, figuran distintos casos que evitan la exclusión de las minorías. Entre ellos, los autores de la Separata mencionaron:
En vez de decir “el hombre”, hablar de “la humanidad”.
En lugar de gentilicios, como “haitiano”, usar “la comunicada haitiana”.
En lo posible, evitar hablar de médicos o enfermeras y, en cambio, usar “personal sanitario”.
No decir “los docentes” o “las docentes”, sino eliminar los artículos y hablar solamente de “docentes”, sin distinción de género.
Para “el refugiado”, “la persona refugiada”.
Antes de decir “una mujer policía”, mejor “una policía”.