Durante una entrevista con CNN, el presidente, Javier Milei, habló de megacárceles, de su relación con EE.UU. y dejó su opinión sobre Gustavo Petro (presidente de Colombia), Andrés Manuel López Obrador (presidente de México) y sobre el papa Francisco.
“Lo más importante es mi alineación con Estados Unidos, independientemente de quién esté en el Gobierno”, dijo. Luego aclaró que “sus preferencias son públicas”. Además, Milei describió a Estados Unidos como uno de sus aliados internacionales.
Si bien aseguró que su relación con la administración de Joe Biden es “excelente”, en más de una ocasión expresó su cercanía a los republicanos. “Soy más afín a las ideas del Partido Republicano. Ese es el punto. Eso es cierto y eso es conocido. Pero mi prioridad es ser aliado de Estados Unidos”, afirmó.
La izquierda en Latinoamérica
Mieli retomó sus críticas al socialismo, acusando a sus líderes de tener una “doble vara” para criticar a las dictaduras. “La izquierda en sus distintas versiones es el cáncer de la humanidad”, remarcó.
“Sin dudas los peores presidentes de América Latina por escándalo es lo que tiene que ver con la dictadura de Venezuela, con el comunismo que quiere impulsar en Colombia Petro, lo que tiene Nicaragua o lo que tiene Cuba”, señaló.
Duros conceptos contra sus pares
En su estilo vehemente, dedicó duras palabras a los presidentes de Colombia y México. A Gustavo Petro lo calificó de “asesino terrorista”, lo que desencadenó un conflicto diplomático, mientras que llamó “ignorante” a López Obrador.
Sin embargo, las escaramuzas parecían superadas, luego de que México negó que considerara expulsar al cuerpo diplomático argentino y la propia canciller, Alicia Bárcena, dijera que había hablado con su par de Argentina, Diana Mondino, y afirmado una relación bilateral de cooperación y mutuo respeto.
Megacárceles en Argentina
El presidente libertario dio detalles del proyecto para la construcción de cárceles en Argentina. “Hay una parte que tiene que ver con el sistema carcelario, pero no es solamente el sistema carcelario. Nosotros en estos días estamos enviando una ley que lo que permite es que en casos de terrorismo las Fuerzas Armadas puedan intervenir en en el lugar. Hoy día eso no se puede hacer. O sea, las Fuerzas Armadas solamente pueden intervenir en caso de que haya un estado de sitio”, precisó.
“En Rosario es el lugar del país donde más fuerzas tenemos asignados -añadió-. Lo que nosotros estamos trabajando es en una solución intermedia, donde las Fuerzas Armadas puedan participar en en situaciones de narcoterrorismo. O sea, es una especificación muy concreta y en esos casos las Fuerzas Armadas participan, pero con las reglamentaciones”, dijo.
“Estamos pensando en construir algunas cárceles de 5.000 y 6.000 plazas”, anunció. Milei dijo que “el planteamiento es que las cárceles que ahora quedan en una zona urbanizada sean vendidas “a empresas que se dedican al real estate. Y que esa empresa financie la construcción de una nueva cárcel alejado de la ciudad”.
“Y entonces nos vamos a una cárcel de mayor seguridad, de mejor calidad, de mejores prestaciones, más grandes. Y sin gastar un solo peso”.
Los vínculos con el papa Francisco
El sumo pontífice fue otra de las personas que supo recibir, en su momento, duras críticas de Milei. Sin embargo, ese encono parece haber quedado atrás luego de la audiencia que ambos compartieron el 12 de febrero.
“Lo que le señalé es que él iba a ser recibido con todos los honores de jefe de Estado, que iba a recibir los honores propios de ser el jefe espiritual de la Iglesia Católica, en especial siendo Argentina un país católico. Pero esa decisión depende de él”, dijo Milei.
A pesar de su entusiasmo, puso un manto de suspenso sobre el viaje dada la “carga física” que implicaría para el papa. “Estaría buenísimo que se sienta bien y venga. Yo lo que tengo que hacer es darle todas las posibilidades para que él se sienta de manera maravillosa. Hasta estoy dispuesto a ser su bastón humano, por decirlo de alguna manera, para que tenga idea de cómo estoy dispuesto a acompañarlo. Pero no hay que presionarlo ni empujarlo”, insistió.