La represión policial sufrida el lunes de esta semana por parte de un grupo de trabajadores tucumanos de la salud, que realizaban una vigilia y manifestación pacífica frente a Casa de Gobierno, en el marco de las paritarias de la sanidad provincial, todavía genera repercusiones. Sobre todo, luego de que el ministro de Seguridad provincial, Eugenio Agüero Gamboa, dijera en exclusiva con Tucumán Despierta que “creo que no hubo represión”.
Sin embargo, si para muestra basta un botón y una imagen vale más que mil palabras, el ministro debería saber que los videos que comenzaron a circular desde el pasado lunes no dejan ningún lugar a la duda. Y es que una vieja táctica de la policía de Tucumán fue la que terminó por desencadenar los hechos que hoy circulan en los celulares de miles de personas en toda la provincia.
Previo a la represión contra referentes del grupo, policías implementaron la vieja táctica de hacerse los “comprensivos” con las peticiones, con el único fin de sacar información y tomar por sorpresa a las trabajadoras manifestantes, materializando, una vez más, un accionar absolutamente repudiable y deleznable, totalmente reñido con lo que debe esperar de los “servidores públicos”.
Esto último fue descrito por una de las manifestantes que estuvo en la plaza el día lunes y que volvió a apersonarse ayer para reclamar por el accionar policial. “Se acercaron a darnos su apoyo y a decirnos que nos apoyaban, a decirnos que estábamos haciendo algo lindo, que ellos no pueden hacer”, recuerda Malvina Figueroa. Las declaraciones posteriores de funcionarios del gobierno, ponen de manifiesto, una vez más, algo contundente.
Es decir, la falta de real compresión de la situación económica y social que viven amplios sectores de la sociedad tucumana. En este sentido, Carolina Vargas Aignasse, ministra de Gobierno y Justicia de Tucumán, señaló a la prensa que “la policía ha actuado como debe actuar”, ya que previamente “se los ha invitado a no establecer una carpa”. Pero hay algo que desconoce la ministra.
Sobre esto último, previo al armado de la carpa, que tenía el único fin de preservar a menores acompañantes de la lluvia, se les consultó a los policías antes mencionados. Pero nada de eso importó a la hora de reprimir y lo tendría que saber Agüero Gamboa. Por su parte, Malvina Figueroa reiteró “estábamos haciendo una protesta pacífica, una vigilia en vísperas de las paritarias. Nos turnarnos para cumplir la vigilia y armamos una carpa de 1×1 para los niños”.
“Fuimos rodeado por la Policía, se acercan el señor Jorge Faciano, comisario de acá de Casa de Gobierno, y el señor Daniel Cuéllar, que es de la Comisaría 1ra, a darnos su apoyo, a decirnos que estaban con nosotros, que estábamos haciendo algo lindo. Preguntamos de la carpa y nos dijeron ‘no hay problema'”, aseguró. Figueroa dijo que las autoridades policiales “nos dicen que la Dra. Vargas Aignasse nos iba a recibir para saber qué queríamos manifestar”, antes de que se desate la violencia.
Mientras tanto, los gritos que se escucharon en los videos que se conocieron fueron contundentes: “Sueldos dignos, paritarias ya”, rezaba uno de los carteles que acompañaban la protesta. “¡No pueden reprimir así! ¡Con qué derecho lo hacen! ¡Miren la represión que nos están haciendo! ¡Ustedes tienen madres! ¡Ustedes tienen hijos!”.
“¡Violencia de género, violencia hacia las mujeres! ¡No pueden estar haciendo lo que hacen! ¡Nos están tomando del pelo, por qué son agresivos así!”, reclaman mientras son arrestadas por la fuerza policial. Una trabajadora de la Salud apuntó directamente contra una persona por la violencia recibida: “¡Cuellar, el comisario, el jefe de la 1ra, es el que me ha dejado la cara así!”. Será mejor que tome cartas en el asunto Agüero Gamboa para que esto no se repita.