A una semana de que se destapara el escándalo de Alfredo Toscano vacacionando en Miami cuando los dólares escasean en la Argentina, el alfarismo se encuentra nuevamente entre la espada y la pared. Y es que en el día de ayer explotó la noticia que daba cuenta acerca del aporte no reintegrable por $35 millones solicitado por el intendente de la Capital, Germán Alfaro, al Gobierno de la Provincia para los festejos por el Día de la Independencia.
En ese sentido, el intendente capitalino tuvo en las semanas anteriores la caradurez de olvidarse de su pasado reciente y hasta de criticar al gobernador actual y a los principales dirigentes radicales, luego de que lo ayudaron a conseguir fondos para su no festejo por el Día de la Independencia el 9 de julio pasado de parte del Poder Ejecutivo provincial que comanda Osvaldo Jaldo.
Lo peor de todo, es que Germán Alfaro intenta hacerse el desentendido y ahora monta un circo por medio de uno de sus perritos falderos predilectos como es el caso del Secretario de Gobierno municipal, Rodolfo Ocaranza. La única verdad es la realidad. Está en poder de la prensa la nota de pedido que ha suscripto de puño y letra del siempre polémico y lamentable intendente, Germán Alfaro.
Justamente, es en la mencionada nota conocida ayer martes donde él hace la solicitud de los nada despreciables $35 millones, invocando la necesidad del Municipio de contar con estos fondos para poder desarrollar los festejos del 9 de Julio. En ese marco, cabe preguntarse cómo puede ser tan hipócrita y sinvergüenza de pedir semejante cantidad de dinero para “festejos”.
Aun así, el Gobierno provincial asiste a los municipios a lo largo y ancho de la provincia, sin distinciones partidarias y sobre todo teniendo en cuenta una fecha tan significativa para todos los tucumanos, como lo es el 9 de Julio. Es por ello que ha accedido a esta solicitud que ha realizado el intendente Alfaro con estos fines. Así, se concedió la asistencia financiera que ahora quedará en las discrecionales manos del oficialismo municipal.
No en vano, la opinión pública, en esta oportunidad, tuvo que darle la razón a lo que viene diciendo el diputado nacional, Roberto Sánchez, con respecto a que el intendente Germán Alfaro tiene doble discurso. Y es que el giro de los fondos, para costear las celebraciones patrias, fue solicitado a través de una nota enviada por el Intendente donde explicaba sus inconfesables razones.
“Motiva el presente pedido la necesidad de contar con fondos financieros suficientes para hacer frente a los gastos que demanden los festejos a realizarse en esta ciudad en conmemoración del 206 aniversario de la Declaración de la Independencia de nuestro país, que tuviera lugar en la Ciudad Histórica de San Miguel de Tucumán el 9 de julio de 1816”. La misiva fue respondida inmediatamente al día siguiente con el pedido aprobado.
Ahora bien, fue aprobado para “para hacer frente a los gastos que demanden los festejos a realizarse en la ciudad en conmemoración del 206 aniversario de la Declaración de la Independencia Argentina… en consecuencia resulta menester proceder de conformidad a lo gestionado, dictando para ello la pertinente medida administrativa, y asimismo autorizar a la Dirección de Administración del Ministerio de Economía a emitir la correspondiente Orden de Pago”.
Sin embargo, ahora quedará en manos de la inescrupulosa arbitrariedad del alfarismo. En ese sentido, ni lerdo ni perezoso, Rodolfo Ocaranza salió al cruce de las críticas tras recibir un “aporte no reintegrable” por $ 35 millones por los festejos por el 9 de Julio. El funcionario alfarista aclaró que se había tratado de un reembolso que el Poder Ejecutivo (PE) había hecho efectivo. Pero la razón esgrimida fue todavía más insólita.
“Por el desorden, destiempo y poca seriedad” en la organización del evento musical realizado en la escalinata de la Casa de Gobierno, adujo de forma desvergonzada Ocaranza. Pero, ¿Acaso no era el propio Alfaro el mismo que hablaba en la previa al 9 de Julio, que la situación económica de la gente no estaba para gastar dinero en fiestas? Más hipócrita y caradura no se consigue, ya que primero dice una cosa y luego hace otra.
Ocaranza expresó que el Gobierno había depositado $25 millones de los $35 millones pactados. “Hay un saldo de $10 millones que todavía está pendiente”, apuntó el funcionario, quien negó que se tratara de un “aporte no reintegrable” como lo establecía el Decreto provincial. Lo peor del caso es que habla de un resarcimiento, cuando se conoció la nota firmada por el intendente haciendo el pedido.
Es decir que la visita de Horacio Rodríguez Larreta a Tucumán con el único propósito de apoyar a un Germán Alfaro cada vez más debilitado y a quien funcionarios públicos como así también la opinión pública comienza a darle la espalda, terminó costando la friolera de nada menos que uno $35 millones. La desesperación de Alfaro se huele hasta la Capital Federal desde donde tuvieron que brindarle auxilio.
Para colmo, a pesar del gesto de la Provincia con la intendencia, una semana después Alfaro salió con los tapones de punta contra sus pares de la Unión Cívica Radical (UCR), Alejandro Molinuevo (Concepción), Mariano Campero (Yerba Buena) y Sebastián Salazar (Bella Vista) y el diputado nacional Roberto Sánchez, que el 13 de julio se reunieron con Jaldo, quien valoró que “se han venido a poner a disposición para ver en qué pueden acompañarnos”.
Cabe mencionar que, tras conocerse del auxilio económico para que los festejos del 9 de Julio puedan realizarse con normalidad, la UCR, hoy presidida por Sánchez, devolvió el golpe y acusó a Alfaro de tener un doble discurso. Y es que a nadie le entra en la cabeza que mientras funcionarios alfaristas criticaban la actitud transparente y con profunda vocación democrática de la UCR, el intendente German Alfaro le pedía $35 millones al Gobierno provincial.
Doble discurso, doble cara, hipócrita, derrochador serial, son sólo algunas de las calificaciones que comenzaron a hacerse virales en las redes sociales que cumplen la función de ser un termómetro de la sociedad. Esto indica que la gente le da la espalda a Alfaro de forma cada vez más sostenida debido a que ya se dio cuenta acerca de que el intendente capitalino hizo suya la máxima que dice “hagan lo que yo digo, no lo que yo hago”.
