“Es vergonzoso que el oficialismo siga usando las instituciones públicas para dirimir sus internas de poder. La Defensoría del Pueblo, que debería ser un espacio conducido por funcionarios probos e independientes para velar por los intereses de la gente, hoy se ha transformado en un botín de la guerra entre el gobernador y su vice. La decadencia de Tucumán queda en evidencia en una elección que está muy lejos de los intereses de los ciudadanos”, indicaron los referentes de la UCR, el diputado José Cano y la senadora Silvia Elías.
Ambos coincidieron en cuestionar la polémica abierta por la elección de renovación del ombudsman en Tucumán. Los parlamentarios radicales, quienes mantuvieron encuentros con dirigentes opositores de la sección Oeste, advirtieron que la interna política del PJ puede poner aún más en riesgo la delicada situación institucional de Tucumán.
“El problema no es la oposición. Ellos conducen la provincia desde hace más de dos décadas, controlan todos los poderes e incluso al Poder Judicial. Pero están más preocupados por acaparar poder y recursos que en los problemas de la gente. Manzur y Jaldo pelean ahora por tres cargos en la Defensoría del Pueblo o quien será el futuro gobernador, que se elige dentro de dos años y medio, pero no pueden definir una política de seguridad que impida que a los tucumanos los dejen de matar en las calles. Es un insulto al pueblo que dicen cuidar”, concluyeron.