El dólar libre cerró la semana sumando cuatro ruedas consecutivas operando en niveles récord. Ayer a la tarde sumó $5 para cerrar a $219 en el mercado paralelo, mientras que las cotizaciones financieras continuaban con tendencia alcista. De esta manera, en el mercado informal la divisa lleva acumulado un avance de $11 (un 5,3%) en lo que va de enero. Mientras que la brecha cambiaria con el dólar mayorista trepó al 110%, considerando que esa cotización subió tres centavos, a $104,34.
En ese contexto, analistas dieron cuenta de los 4 factores que hicieron que esta semana el dólar “blue” rompiera su propia marca todos los días desde la rueda del martes. Cabe recordar que el pasado viernes la divisa cerró a $209,50 y esta semana inicio con un descenso de 50 centavos en un contexto en el que se celebró un feriado en los Estados Unidos. No obstante, el martes el dólar libre dio un salto de dos pesos para registrar una nueva marca histórica al alcanzar los $211.
En la siguiente rueda, la del miércoles, el “blue” volvió a subir en la misma magnitud: $2 para cerrar en $213. En tanto ayer la presión alcista continuó y la divisa saltó otro peso para cerrar la rueda en $214, hoy el dólar libre no parecía tener freno, por lo que escalaba $4 hasta alcanzar la inédita cotización de $219. En ese contexto, los analistas reconocieron 4 factores claves para dar cuenta del impulso alcista del dólar libre
La fuerte emisión que se viene registrando desde el último trimestre de 2021 que dejó muchos pesos en la calle; la incertidumbre en torno a las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para restructurar el crédito stand by por USD 44 mil millones; la volatilidad de los mercados internacionales y la alta inflación que hace que la gente no quiere tener pesos y busque refugiarse en la divisa.
Lo cierto es que confluyeron varias cuestiones para generar este escenario y la primera de ellas es “el ruido” en torno al acuerdo con el Fondo. El Gobierno no da señales claras y dilata las negociaciones. Por otro lado, hay muchos pesos que se fueron cobrando como aguinaldo, bonos y esos pesos que andan dando vuelta, ante tanta incertidumbre y ante la presión inflacionaria, van al dólar en general.
En ese sentido, también hay mucha volatilidad internacional y una exigencia mayor para los mercados financieros y eso se hace notar en el tipo de cambio. La aceleración inflacionaria también está dejando escueta la señal de suba de la tasa de interés por parte del Banco Central, que pasó del 38% al 40% este mes. Por eso la tasa es negativa y es un lastre que no genera incentivo para estar posicionados en pesos.