Con un importante despliegue de la fuerza, la Policía de Tucumán inició desde la noche del viernes un fuerte operativo para neutralizar reuniones familiares y fiestas clandestinas como así también para controlar el cumplimiento del horario en cierres en bares, restaurantes y cervecerías.
El comisario José Ardiles, Subsecretario de seguridad de la provincia en diálogo con Radio Bicentenario, especificó: “La policía de Yerba Buena recibió una denuncia anónima de que en un local de la avenida Presidente Perón había una reunión con gran cantidad de personas y vehículos y fue así que cuando llegó la fuerza policial efectivamente las personas estaban comiendo un asado después de haber jugado al futbol. Rápidamente se dio intervención a la fiscalía y dispuso que los vehículos que eran alrededor de 20, sean secuestrados y llevados al Palacio de los Deportes por sesenta días”.
Con respecto al horario de cierre de bares y restaurantes dijo: “concretamente no hubo más inconvenientes. En la calle después de las 22.00 horas no se vio mucha gente”.
Ardiles informó que seguirán realizando los operativos y que serán muy rigurosos con las medidas de bioseguridad.
“Las denuncias al 911 son generalmente llamados a los cuales siempre les pedimos los datos, son pocas las ocasiones en las cuales recibimos un llamado anónimo”, finalizó.