Todo empezó hace una semana, cuando el nene de cinco años golpeó la puerta en la casa de su vecina en la localidad misionera de Garupá. “¿Podés llamar a la Policía para que busque a mi mamá y me busque a mí porque ayer dormí solito?, le dijo. Pero todavía no la encontraron.
El chico estaba sucio, descuidado y lo primero que le pidió a la mujer después fue si podía darle algo de comer. Ella, de 22 años y con ocho meses de embarazo, lo alimentó y alertó a la policía, por lo que tomó intervención la Defensoría 8 de esa localidad y decidieron que el menor fuera enviado en guarda al Hogar Norberto Haase.
Desde ese momento, las autoridades intentaron sin éxito dar con familiares del nene. Tampoco vino nadie a reclamarlo, indicó el sitio El Territorio. Según trascendió, el padre murió hace tiempo y la madre, de 35 años, lucha contra su adicción al alcohol.
En tanto, Miguel Molina, defensor de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, dijo a Radio Libertad de Posadas que buscarán “ver si la familia está en condiciones de proteger al nene”. Luego buscarán en la familia ampliada y “de no encontrar a alguien en ese ámbito, se disparan los mecanismos de adopción”. “El nene no tiene que estar mucho tiempo en un hogar, los términos legales son seis meses”, explicó.